Cuando el encierro se vuelve hecho cotidiano y la idea de volver a la sala es lejana, la casa propia empieza a tomar forma de espacio escénico. Pero no solo eso, también de usina creativa, o más apropiado decir, una "cocina" generadora de nuevas obras y performances. ¿Pero qué pasa si, además, hay que conectarse con otros pares a cientos de kilómetros por una pantalla? En esa pregunta intentará indagar, a la vez que encontrar la respuesta, la actriz Lorena "La Negra" López. La co-fundadora de La Notannegra Teatro (elenco gestor de obras como "Luisa", "Galgo" y "La Salmuera" entre otras junto a Natacha Sáez) será la artista que representará a San Juan en Proyecto Casa. Se trata de una residencia especial a la que fue convocada por Isla de Contenidos (integrada por Gabriela Trevisani, Nadia Grandón y Rocío García) de Paraná, Entre Ríos, que se concreta anualmente y que, tomando en cuenta la situación generalizada por la pandemia, se realizará de manera virtual utilizando a Zoom como principal herramienta de comunicación.

En 24 días, cuatro grupos de tres hacedores cada uno (llamados tríadas y conformados por bailarines, performers, directores, músicos, artistas visuales, actores y actrices) deberán crear una obra, puesta escénica o performance original utilizando la casa como espacio y recurso expresivo, cuya instancia final será la presentación de la misma al público en modo online.

Esta plataforma digital permitirá un cruce de experiencias con el fin de desarrollar estrategias para la creación de nuevas poéticas entre diferentes creativos de varias ciudades del país y del exterior. Lorena, para su caso, forma parte de la Tríada 1 y deberá articular y vincularse con Carina Resnisky, directora teatral proveniente de Concepción del Uruguay y Luciana Obaid, actriz oriunda de Paraná. 

Es la primera vez que López, será seleccionada para una residencia y también, tendrá una experiencia totalmente nueva, porque el objetivo será todo un desafío: concebir una propuesta teatral instalada en su casa pero construida desde lo colectivo. El tiempo corre y Lorena se puso manos a la obra. En el arranque de este arduo proceso, manifestó su inmensa alegría por participar: "Tenemos que crear todo desde cero. Estoy más que feliz por haber sido selecciona y poder representar a San Juan, como también al ver compañeras y compañeros de otras provincias reconozcan la labor del teatro independiente que se hace aquí, eso me parece genial", expresó.

Uno de los objetivos de la residencia apunta a generar pensamiento crítico y estrategias de producción, el debate, el análisis y sobre todo mucho intercambio, pensado todo en función de lo que se tenga "a mano" para trabajar. Para López, se da una toma de riesgo importante, porque queda expuesta ante colegas que no conoce y que sólo están mediadas por lo digital; y por otro lado, deberá disponer de muchas energías tomando en cuenta el contexto del aislamiento.

Sin embargo, cuenta con experiencia reciente que le favoreció al haber puesto en marcha, junto a Lila Guzmán y Natacha Sáez, el ciclo "Solas" que se viene dando los fines de semana. La discusión interna que está presente durante el proceso creativo -que seguramente se dirimirá a lo largo de toda la residencia- es cuánto de teatro realmente hay en una puesta "a distancia" o "en línea" dentro de una pantalla conectada a Internet. La cuestión de romper los límites físicos mediante la virtualidad es un eje que atraviesa en estos momentos a los realizadores escénicos de todas latitudes. Así que la experimentación parece que es el camino más posible: "Descubrimos que, al trabajar desde un rincón de una habitación y frente a una cámara, podemos crear acciones hermosas, que nos permite experimentar. Sabemos que no es lo mismo lógicamente que una sala común con espectadores presentes, no podemos reemplazarlo, es algo único. Pero con la experiencia de ‘Solas’, afirmamos que se puede disfrutar y romper con los paradigmas, con la discusión de si es o no teatro. Es posible readaptarse a lo virtual. Estamos en aprendizaje permanente, y ese compromiso y responsabilidad al pararse en un escenario, se aplica de la misma manera en la pantalla. Estar más tiempo en casa, me dará mayor posibilidad de estudiar el espacio, la voz y el cuerpo, para profundizar que el teatro virtual, sí funciona", expresó la intérprete de Luisa. Sostuvo además que el propósito es comunicar siempre y en ese sentido comentó: "Ver qué planos usar, tratar que conectemos con el espectador, se va logrando desde el vivo y funciona, enriquece la escena y nos ayudará a reinventarnos".

Por último, López destacó que lo beneficioso que puede resultar de lo que aprenda de esta residencia será también el vínculo que pueda lograr con sus pares de distintas regiones, con sus respectivas poéticas para trabajar en una instancia de trabajo federal; y por otro lado, valorizarse como trabajadores independientes del teatro de provincias y no de "un interior" de un país desconocido de la mirada centralista de Buenos Aires. Además, propiciar a la generación de festivales con este tipo de temáticas en medio de este contexto complejo y crítico que atraviesan los artistas escénicos del país en medio de la pandemia.

 

  • Sobre Proyecto Casa

Una vez terminada la residencia, todas las obras creadas tendrán sus funciones virtuales con acceso libre y gratuito para el público. Estrenarán el 17 de septiembre. El 20 de septiembre habrá charla y desmontaje de las mismas, vía online.