Investigadores argentinos encontraron en Río Negro restos fósiles de 90 millones de años de antigüedad de un nuevo dinosaurio herbívoro con uno de los cuellos más grandes del mundo. Constituye un hallazgo sin precedentes por ser la especie más grande descubierta en esa provincia.
El dinosaurio vivió en la Patagonia a fines del Cretácico Superior junto a depredadores, peces y tortugas marinas. La nueva especie, bautizada Chucarosaurus diripienda, se encuentra entre los dinosaurios más grandes del mundo con sus 30 metros de largo.
El hallazgo tuvo lugar en 2018, cuando una expedición se topó con huesos de un tamaño y peso descomunal en la Reserva Natural Pueblo Blanco, en Río Negro, y descubrió que se trataba de una especie nueva del grupo de los saurópodos colososaurios, que significa saurios colosales.
"Chucarosaurus es un titanosaurio perteneciente al grupo de los saurópodos colososaurios. Por el tamaño de su fémur, de unos dos metros de largo, estimamos que debía pesar entre 40 a 50 toneladas y tener unos 30 metros de largo. Esto lo convierte en la especie más grande hallada hasta el momento en la provincia de Río Negro", afirmó Matías Motta, paleontólogo y coautor del trabajo, según publicó el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) en un comunicado.
El estudio de sus restos óseos ya fue publicado meses atrás en la prestigiosa revista científica Cretaceous Research.
Los restos hallados, consistentes con las extremidades de dos individuos diferentes, fueron descubiertos a unos 25 kilómetros al sur de la Villa el Chocón, en el marco de una campaña del equipo paleontológico del Museo Argentino de Ciencias Naturales "Bernardino Rivadavia", a cargo del investigador del Conicet Fernando Novas.
En esta localidad ya se han hallado una gran cantidad de dinosaurios, incluyendo enormes carnívoros, pero hasta el momento no se habían descubierto dinosaurios herbívoros.
Los huesos del Chucarosaurus son "notablemente más gráciles, lo que hace pensar que debía ser bastante más esbelto que otros gigantes", acotó Federico Agnolín, primer autor del trabajo.
"El estudio de Chucarosaurus amplía el conocimiento anatómico de los huesos apendiculares de los titanosaurios, como húmero, fémures, isquiones y tibias. Sus diferencias morfológicas debieron estar vinculadas a diversas adaptaciones ecológicas en los ambientes continentales fluviales donde habitaban", concluyeron.
Los investigadores nombraron a la especie "Chucarosaurus diripienda" debido a que el peso de los huesos del dinosaurio hizo que la camioneta que los trasladaba al laboratorio del museo en Buenos Aires se desbalanceara y volcara. Ningún paleontólogo salió herido.
"Chucarosaurus diripienda significa dinosaurio duro revuelto. Revuelto porque se revolvió todo en el accidente y sobrevivió", dijo el paleontólogo Nicolás Chimento. El dinosaurio iba a ser presentado ayer a las 19 en el Complejo Cultural Cipolletti, en la provincia de Río Negro.