El negocio lo empezó el abuelo, que era distribuidor de helados en Córdoba, lo siguió el padre y en la actualidad son la tercera generación los que continúan la tradición. Se trata de Grido, que en italiano significa grito, el primer fabricante de helados de Argentina y el que tiene la mayor cantidad de franquicias, 1.500 en total. De ese número, 1.350 están en el país y las otras 150 están repartidas entre Chile, Uruguay y Paraguay. Sebastián Santiago (43), director comercial de la firma, estuvo ayer en San Juan como expositor de "Endeavor Potencia San Juan", un encuentro destinado a "inspirar" a los emprendedores. Antes de su charla, contó algunos secretos de su próspera empresa, que no para de crecer.
"Primero que nada nacimos como una empresa familiar y cuando empezamos a crecer adoptados el sistema de franquicia como modelo de negocio, que nos ha permitido la actual expansión", dijo Santiago. La franquicia está basada en la confianza mutua entre el dueño de la marca y quien adquiere la franquicia. El primero aporta la experiencia empresarial y el producto y el otro suma el espíritu para que sea un éxito.
Santiago contó que los pilares de la marca son "contar con un producto de calidad y a buen precio".
Entre los secretos de la empresa relató que empezaron apostando a no sólo vender helados en el verano, que era lo más común, sino también a imponer el producto en el invierno, por ejemplo manteniendo abiertos los locales todo el año y no sólo en la temporada estival. Además, en la época de frío, incorporaron otros productos a los negocios. "El complemento ideal son los congelados", sostuvo el empresario y mencionó a las pizzas, las pechugas de pollo y los bastoncitos de muzzarella.
En Grido quieren ser parte de la canasta de alimentos y tener un lugar en el freezer.
"Al inicio, con una heladería, no teníamos volumen, pero teníamos en claro que ese era el objetivo y el público validó la estrategia. La cantidad, sumada a la tecnología, nos permite reducir costos. Siempre tuvimos una visión de largo plazo, pero nunca pensamos llegar a 1.500 bocas".
Grido concentra toda su producción en Córdoba, desde donde distribuye en camiones ultracongelados a todo el país y los limítrofes.
Junto a sus hermanos, Sebastián Santiago forma parte del directorio que preside su padre, Lucas, y su tarea es como la de vocero del grupo. "La verdad es que en estos años nos ha ido muy bien y en el caso de San Juan estamos desde hace 14 años", contó el empresario.
"Cuando empezamos queríamos tener 50 franquicias en Córdoba, era nuestra máxima aspiración, pero después el negocio se nos fue de la manos", contó con una sonrisa.
"Desde los comienzos apostamos a que se consumiera más helado en la Argentina, porque hace 18 años atrás el consumo era bajísimo y empezamos a pensar en que la gente comiera más un producto que es un alimento, sano, nutritivo y por sobre todas las cosas es rico", expresó.
Para el futuro la idea "es seguir agregando productos porque hay oportunidades".
Una inspiración
Dar asesoramiento a las empresas para lograr competitividad y que sean sostenibles en el tiempo, fue el objetivo del "Endeavor Potencia San Juan", que tuvo lugar ayer en el Centro de Convenciones Barrena Guzmán. Fue a través de los testimonios de empresarios exitosos, que contaron sus experiencias y consejos, con la idea de que sirvieran de inspiración a los emprendedores.
Junto con las exposiciones también tuvo lugar una muestra de trabajos de empresas emprendedoras locales, que fue visitada por el vicegobernador Marcelo Lima, junto con el titular de Producción, Andrés Díaz Cano, y la secretaria de Industria, Sandra Barceló.
La jornada también contó con "Workshops", o talleres claves para emprender y hacer crecer los negocios y se desarrollaron consultorios de mentorías grupales con expertos y emprendedores de la red Endeavor en temas de conflicto a la hora de emprender o crecer con las empresas. La actividad se repetirá el año próximo.
"Damos trabajo a los jóvenes"
"Nuestro trabajo es generar las primeras oportunidades de empleo a los jóvenes de los barrios", dijo Emiliano Fazio (42), uno de los miembros que gestiona a un grupo de empresas bajo el nombre de NJambre. Desde esa posición, una de las empresas que asesoran es Arbusta, que vende testing de software. Se trata de probar, por ejemplo, una nueva página web de una empresa.
Fazio eligió contar la experiencia de esa empresa. En eso de dar la primera oportunidad de trabajo contó que toman a los chicos, que pueden tener entre 16 ó 17 años, y que incluso muchas veces no han terminado el secundario, y les enseñan los primeros pasos del mundo de la computación.
"No es magia, creemos que el talento existe en todos lados y por eso tratamos de darles una primera oportunidad a los jóvenes", explicó.
Trabajan con chicos de Buenos Aires, Rosario (Santa Fe) y de Medellín (Colombia) en tareas tales como pruebas de páginas web, gerenciamiento de datos, clasificación de bases de datos y también moderan contenidos de los diarios para sus lectores, como en el caso del diario La Nación, de Buenos Aires.
"El primer empleo en la economía digital deja a los jóvenes muy aptos para el mercado laboral", sostuvo Fazio.