
En las últimas horas, la Jefatura de la Policía asignó nuevos funcionarios que trabajarán en el depósito judicial de 9 de Julio, luego del escándalo que involucra a Gustavo Padilla y a un grupo de policías que están siendo investigados por el supuesto uso de vehículos radiados y de sacar autopartes.
Según informaron, el objetivo de la designación es “concretar una exhaustiva auditoría de los vehículos existentes”. Además de, “ejecutar eficaz y eficientemente los requerimientos efectuados tanto por la Justicia como por la Subsecretaría de Inspección y Control de Gestión de la Seguridad Pública”.
El personal estará a cargo del subcomisario Carlos Trigo, quien venía desempeñándose como jefe del Comando Urbano.
La intervención se produce en el marco de la investigación en torno al accionar de Gustavo Padilla, por ese entonces Jefe del Depósito Judicial, quien le compró a una mujer el auto a un precio bajo y después fingió un acta para auto entregárselo y disponer del vehículo.
A Padilla lo procesaron con prisión preventiva por el delito de abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público al usar una camioneta Toyota para ir y venir de su casa y hasta para ir de paseo con amigos, cuando la movilidad debería haber sido usada únicamente para el trabajo en el depósito de 9 de Julio.
En la misma causa está en la mira el juez de instrucción Pablo Flores, a quien le pidieron un Jury para indagarlo, ya que se sospecha que entregó ese vehículo cuando no podía hacerlo, dado que se trata de una facultad exclusiva de la Corte de Justicia. Además, los investigadores quieren sacarse todas las dudas respecto del vínculo que tenía o tiene con Padilla.
