Tras violentos días de protestas, que ayer incluyeron incendios de autobuses, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció por la tarde la suspensión del aumento de las tarifas de los pasajes del Metro (subte) de Santiago.
"He escuchado con humildad la voz de mis compatriotas. Vamos a suspender el alza de los pasajes del Metro, lo que requerirá la aprobación de una ley", dijo ayer el mandatario desde el gubernamental Palacio de La Moneda.
En las primeras horas de ayer, el presidente Piñera decretó el estado de emergencia en Santiago, capital de Chile. El general del Ejército al cual Piñera encargó el cumplimiento de un estado de emergencia, Javier Iturriaga, detalló que ha desplegado a 500 militares para controlar 16 ejes principales de la ciudad y patrullar para evitar altercados. Iturriaga anunció además un toque de queda hasta las 7 de hoy para las provincias chilenas de Santiago y Chacabuco.
La medida de excepción rige para la provincia de Santiago, la provincia Chacabuco y las comuna de Puente Alto y San Bernardo, pertenecientes a la Región Metropolitana.
El pasado 6 de octubre, el Metro de Santiago (subte), una empresa privada en cuya propiedad participa el Estado chileno, aumentó en 30 pesos el precio del ticket en hora punta, hasta situarse en 830 pesos (unos 1,2 dólares). El precio lo fija el llamado Panel de Expertos con base en varios indicadores, como la inflación, el costo de los suministros para su operación y el tipo cambio, y es aprobado por el Ministerio de Transportes.
En promedio, una persona que utiliza el Metro como sistema principal de movilización desde su casa al trabajo, llegaría a gastar 33.200 pesos al mes aproximadamente. Si se toma en cuenta que el sueldo mínimo actualmente en Chile está fijado en 301.000 pesos, esto significa que una persona en promedio se gastaría el 11 por ciento de su salario solamente en transportarse desde su hogar hasta el trabajo.
Desde el Ministerio de Transportes han confirmado que el alza en el precio del subte se debió a la aplicación del indexador tarifario y otros costos operacionales.
Piñera llegó a prometer ayer la elaboración de un plan para mitigar el impacto de la subida del boleto de metro en los sectores más vulnerables. La jornada de ayer volvía a registrar disturbios violentos en Santiago, con la quema de tres autobuses urbanos y enfrentamientos con las fuerzas de seguridad y los militares, además de cacerolazos.
Según reportes oficiales, por unos disturbios del viernes pasado hubo 308 detenidos y 167 heridos. Asimismo, 41 de las casi 140 estaciones del Metro de Santiago de Chile y 16 autobuses urbanos fueron quemados.
El enojo por el precio del subte ha sumado el descontento de parte de la sociedad por los bajos sueldos y las tarifas de la electricidad, la gasolina o los medicamentos. En protesta por la subida del boleto del metro, cientos de ciudadanos, en especial estudiantes, iniciaron el pasado lunes entradas masivas al suburbano y levantaron las mamparas de cobro para que los pasajeros ingresasen a los andenes sin pagar. Con la declaración del estado de emergencia y la red de metro cerrada, en principio hasta mañana, las autoridades estudiaban suspender las clases.