Las jornadas previas al Día de la Madre siempre han sido momentos donde el microcentro y los shoppings sanjuaninos se han atestado de gente. Pero este 2020 pareciera ser la excepción y no es para menos.

El efecto de la pandemia, que va desde miedos por salir a la calle y poco plata en el bolsillo producto de la crisis económica, hizo que durante esta última semana no se vean multitudes en las calles y, al menos el sábado por la mañana de este sábado, la concurrencia a los negocios fue normal.

Se observaron algunas filas en comercios muy puntuales (debían respetar la capacidad máxima autorizada por negocio y afuera el distanciamiento), mientras que en otros el flujo de clientes era apena sun poco más que en el habitual en los rubros donde se venden artículos propios para esta fecha.

Eso sí, después de que el Municipio de la Capital hablara el jueves pasado con los comerciantes para que ajusten las medidas sanitarias, se vio en los negocios más preocupación porque se cumpla el distanciamiento y el uso de barbijo.