Industrial. Gustavo Fernández (primero desde la derecha) junto a Hugo Goransky, titular de la Unión Industrial local, y Miguel Acevedo, presidente de la entidad nacional. El sanjuanino va por primera vez en un cargo político.

 

El partido Dignidad Ciudadana salió a marcar la cancha dentro del principal frente opositor, que hoy se llama Cambiemos. La Comisión Directiva definió ayer que tendrá un precandidato a Gobernador para las elecciones de 2019: se trata de Gustavo Fernández, vicepresidente de la Unión Industrial de San Juan, quien dio el OK para ser de la partida. Si bien la fuerza política tiene que firmar el acuerdo con los demás miembros para una nueva sociedad electoral, todo va encaminado en ese sentido. Y en ese marco, poner en el ruedo un postulante al máximo cargo provincial, en el que ya está anotado el santaluceño Marcelo Orrego, abre el juego a la negociación para buscar otros cargos electivos en el caso de que la alianza decida ir a una lista de consenso. Por lo pronto, el partido sale a mostrarse y a construir una figura nueva para eventualmente competir en las PASO o inclusive ir en soledad.

El lanzamiento de un precandidato a Gobernador por parte de Dignidad Ciudadana se da a ocho días del anuncio de Orrego de ir por el máximo escalón provincial. Los tiempos se aceleraron luego de que el gobernador Sergio Uñac decidiera adelantar las elecciones al primer semestre del año que viene.

Dignidad Ciudadana nació formalmente en 2002 y su armado político tiene base principalmente en Capital. En 2015 integró el frente con el PRO y la UCR y conquistó sus primeros lugares: una concejalía en la ciudad de San Juan y una banca de diputado proporcional. Para una fuerza política nueva, fue el salto a espacios de protagonismo y discusión, que apuestan a conservar e inclusive, tratar de aumentar. Pero ahora se abrirá un espacio de diálogo y negociación con el actual intendente de Santa Lucía, que pertenece al principal partido de la oposición, Producción y Trabajo, y que será el líder del frente.

El diputado Fernando Moya, secretario General de Dignidad Ciudadana, y el concejal capitalino Ricardo Marún, vice primero, coincidieron en señalar que el partido apuesta a seguir creciendo, a ser protagonista y a posicionar a nuevas figuras en el marco de un recambio generacional. Fernández tiene 44 años, viene del sector industrial (ver aparte) y señaló que "entiendo que es momento para dar otras respuestas y desde la experiencia que uno ha cosechado en la actividad privada, contribuir en la discusión política para la construcción del bien común y lo social en general".

La idea que reina en el partido es volver a integrar el frente opositor, aunque todo debe quedar sellado puertas adentro. La fecha límite para la definición de las alianzas es el 10 de enero. En la largada de la carrera electoral, Dignidad Ciudadana ya cuenta con un precandidato a Gobernador, que fuentes calificadas reconocieron que es una herramienta. Si la intención de la futura sociedad es lograr una lista de consenso que, por ejemplo, encabece Orrego, se abre la puerta a discutir otros cargos en diferentes lugares. Si no, el camino es la disputa en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). La última alternativa es competir en soledad, admitieron las fuentes.

Así, el frente opositor empieza a mostrar los movimientos de los que van camino a ser sus integrantes. Entre otras de las decisiones está el nombre de la sociedad electoral. A propuesta de Orrego, lo que fue convalidado por el resto, se le modificará la denominación de Cambiemos por otra. El argumento es que en la elección se discutirá lo provincial, pero en la práctica es despegarse del sello macrista.
 

Perfil

Gustavo Fernández tiene 44 años y se recibió de la Universidad Católica de Cuyo como contador público. Va por su tercer período como vicepresidente de la Unión Industrial de San Juan. Está afiliado a Dignidad Ciudadana y en la actividad privada es socio y director de la firma Cemento Cerro Blanco.