El fiscal de la UFI Anivi Eduardo Gallastegui anticipó que buscará una condena de 5 años de prisión efectiva para un director de escuela cuando sea enjuiciado por el presunto abuso sexual de un alumno de 17 años al que supuestamente manoseó en el establecimiento de Santa Lucía que estaba a su cargo. La jueza de Garantías Gema Guerrero el viernes dio por cerrada la investigación y elevó la causa a juicio, donde Fiscalía intentará demostrar la culpabilidad de Carlos Federico Wiederhold (54), a quien le enrostran el delito de abuso sexual simple agravado por su condición de encargado de la educación.
Wiederhold, ya separado de la Escuela General Antonio González Balcarce, donde fue director unos 10 años, llega al debate en libertad, representado por el defensor Leonardo Villalba. Fue denunciado en noviembre del año pasado por una trabajadora social y un psicólogo de la residencia estatal donde vive el menor de 17 años.
La acusación indica que un día sábado de ese mes, en horario de mañana, la víctima, alumno de 5to año, había asistido a la escuela para tomar clases de apoyo. Según fuentes judiciales, en un momento en que se encontraba cerca de la cocina, parado contra una pared conversando con el director, este se le acercó, apoyó una mano en su pierna y con los dedos le tocó el pene, por arriba de la ropa. Inmediatamente el joven se corrió hacia un costado y Wiederhold hizo como que no había pasado nada, consta en la denuncia.
En la pared de uno de los baños de la escuela alguien escribió la frase "Director toca nenes"
El caso salió a la luz en un abordaje de rutina que hicieron los profesionales de la residencia. Al consultarle al chico cómo le iba en la escuela, a regañadientes contó que el director lo tomaba de la cintura y abrazaba por atrás, y reveló que le había tocado los genitales. Dijo además que no lo había contado antes por miedo.
Entre las pruebas con las que cuenta Fiscalía, figura el informe psicológico que consigna que existen indicadores de angustia en el menor y que posee pensamientos de suicidio. Además, las declaraciones de dos preceptores de la escuela que refirieron que varios alumnos se habían quejado por presuntas conductas inapropiadas de Wiederhold, como abrazos y palmadas.