Las lesiones, muchas veces, impiden que los deportistas se consagren en todo su resplandor. Y uno de los tantos ejemplos es Novak Djokovic, quien volvió a los primeros planos del tenis luego de sufrir una lesión en el codo, que lo alejó de las canchas por un largo tiempo.

 

Sin embargo, el deseo y la constante búsqueda de superación a veces pueden más y dejan atrás todos los golpes anímicos que, en algún momento, invadieron la cabeza del jugador. Es por eso que el serbio supo regresar de la mejor forma y consagrarse por cuarta oportunidad en Wimbledon.

 

El ex número 1 del ranking ATP no le dejó chances a Kevin Anderson (verdugo de Federer y nuevo 5° del ranking) al derrotarlo 6-2, 6-2 y 7-6 (3) en dos horas y 16 minutos. Así, el serbio conquistó su 13er Grand Slam y alcanzó los 69 títulos en su carrera.

 

Con 31 años, Djokovic dejó atrás un año y medio de lesiones para ratificar su regreso al circuito. Además, a partir del próximo lunes, Nole volverá al Top 10 tras haber descendido hasta el puesto 22.

 

Por último, el serbio alcanzó los cuatro trofeos en La Catedral, metiéndose en la pelea por los máximos ganador de Wimbledon, detrás de Roger Federer con ocho conquistas, Pete Sampras con siete y Björn Borg con cinco.