Reunión matinal. El presidente Mauricio Macri, en la reunión encabezada ayer por la mañana por la en la Casa de Gobierno. Funcionarios salieron a tranquilizar a los argentinos.

 

Una reunión en la Casa de Gobierno encabezada en la mañana de ayer por el presidente Mauricio Macri tuvo como cuestiones centrales el dólar y las tarifas.

Sobre la situación cambiaria fue tajante y dejó clara su posición en la reunión de Gabinete: "El Banco Central tiene todo el apoyo de la Casa Rosada". Lo dijo luego de escuchar al ministro de Hacienda, quien había dado su punto de vista sobre lo que está sucediendo en el mercado cambiario: Nicolás Dujovne expuso que "hay una apreciación a nivel mundial del dólar", pero admitió que "en Argentina lógicamente hay que mirarlo con mayor atención porque la costumbre siempre fue pasarlo a precios".

En cuanto a la discusión que la oposición impulsa en el Congreso sobre el costo de los servicios, Macri afirmó que "el tema tarifas es lo más importante, el centro de la batalla cultural".

Ante sus ministros, el Presidente admitió así su preocupación por la insistencia de la oposición en avanzar con un proyecto para limitar y retrotraer el aumento de los servicios públicos y reiteró, en consecuencia, que en caso de que sea aprobado no le temblará el pulso para vetar la ley.

Para Mauricio Macri, la discusión por las tarifas no cambia los planes del Gobierno. "Tenemos claro lo que estamos haciendo y hacia dónde vamos", indicó. No obstante, enmarcó el asunto en esa larga lista de temas que (cree el Presidente) impulsa la oposición para poner palos en la rueda. "Seguimos batallando con la historia de una Argentina que no cumple", lamentó.

Al salir de la reunión en Casa Rosada, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, destacó que "el Banco Central tiene reservas e independencia para poder sobrellevar los vaivenes", para que "cuando hay situaciones fuera de lo común internacionalmente, se puedan priorizar los objetivos de política económica local".

"El Central, acorde a momentos de volatilidad fuera de lo común, puede intervenir para cuidar la política antiinflacionaria", dijo, y recordó que en Argentina el tipo de cambio "es flotante". Agregó que "las situaciones de volatilidad" no tienen que "asustar" y "no hay crisis" cuando la moneda estadounidense "sube un poco, ni cuando baja un poco".

Mientras recorría obras, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, consideró que "la oposición va a escuchar este ruido y va a dar la tranquilidad a los mercados de que la Argentina tiene el rumbo correcto, el rumbo de la responsabilidad en el manejo de las cuentas". En declaraciones en Casa de Gobierno, la diputada nacional Elisa Carrió sostuvo que "el dólar va a bajar" y señaló que hay que acostumbrarse a "estas fluctuaciones porque no tendrían por qué estar alterando lo interno". "Esto está pasando en todo el mundo producto de la política de (Donald) Trump, que ha subido las tasa de interés", afirmó.