Cada 30 de mayo se celebra en la Argentina el Día Nacional de la Donación de Órganos, en conmemoración del nacimiento del hijo de la primera paciente que dio a luz después de haber recibido un trasplante en un hospital público. Esta es una fecha muy importante en la que se promueven actividades de distinto tipo. Pero, dadas las circunstancias a nivel mundial que afecta a la humanidad con el covid-19, signadas por el último transplante doble de pulmón realizado en Italia a un paciente que contrajo el virus, solo por redes sociales institucionales se comparten mensajes destinados a distintos actores que participan directa o indirectamente en el proceso de donación y trasplante. Hasta mayo del año pasado se registraron 356 procesos de donación de órganos que permitieron que 736 pacientes en lista de espera reciban un trasplante, 201 trasplantes más que los realizados en igual período de 2018. También se concretaron 610 trasplantes de córneas. El aumento en la cantidad de donantes permitió que cada vez más personas accedan a un trasplante, pasando de un promedio de 3,6 trasplantes diarios realizados en 2018 a 5 trasplantes diarios concretados en 2019. Esto supone una vida más que se salva por día gracias a la donación. De los 736 trasplantes realizados hasta mayo pasado, 451 fueron renales, 190 hepáticos, 41 cardíacos, 30 renopancreáticos, 14 pulmonares, 5 hepatorrenales, 3 pancreáticos, 1 intestinal y 1 cardiorrenal. Se realizaron también 610 trasplantes de córneas. Los 356 procesos de donación de órganos concretados representan un aumento del 59% con respecto al mismo periodo del año 2018, en el cual se realizaron 224 procesos. La concreción del trasplante es posible gracias a la participación de la sociedad representada en el acto de donar, a la intervención de los profesionales de la salud de los establecimientos hospitalarios de todo el país y al trabajo de los organismos provinciales de procuración pertenecientes al sistema sanitario argentino.