La Mariposa voló fuerte. El holandés ratificó su favoritismo sacándole casi 1 minuto a su escolta, Roglic. Froome fue tercero.

 

No cambió la bicicleta de crono por la de ruta, como lo permitía el reglamento, para afrontar los 3,4 kilómetros finales. Haberlo hecho no sólo lo habría sacado de ritmo sino que, también, le habría dado chances a su rivales, quienes por lo que había hecho hasta el momento sabían que debían resignarse a pelear por el segundo puesto. El holandés Tom Dumolin, ganador del último Giro de Italia, colgó el oro de su cuello tras una exhibición de cómo se anda en solitario. Cubrió los 31,1 km de extensión en un tiempo de 44m41s y aventajó por 57s al esloveno Primoz Roglic y por 1m21s a quien, a prima facie, sería su adversario directo, el británico, Chris Froome.

"La Mariposa de Maastricht" como se lo conoce a este corredor de 26 años se había enfocado en esta carrera y los últimos seis meses los pasó pensando en ganarla. El pasado domingo había ayudado a su equipo, el Sunweb (de bandera alemana) a ganar la medalla de oro en la crono para escuadras y ayer consiguió el triunfo que tanto anhelaba. "Ansío un oro en mi especialidad, afronto la carrera con las piernas frescas", había anticipado el día anterior cuando se lo consultó sobre su estado.

El chubutense Eduardo Sepúlveda corrió la prueba y terminó en la posición 37 a 3m31s.