Tras una reunión del Comité de la Unión Europea, que se celebró ayer por la mañana en Bruselas, los funcionarios decidieron eliminar las trabas del biodiésel argentino. De ese modo, los países europeos ratificaron la decisión de concluir las negociaciones e implementar el acuerdo de precios y volumen en febrero.

 

“Es un acuerdo alcanzado entre el Gobierno argentino y la Unión Europea que nosotros celebramos, ya que consideramos que éste es razonable y trae un beneficio para todas las partes”, dijo al respecto el presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio), Luis Zubizarreta.

 

El monto supera los 1.000 millones de dólares y constituye un alivio para los grandes productores que tenían sus plantas paralizadas ante el bloqueo europeo y estadounidense que los dejaba con todos los mercados cerrados.

 

Las exportaciones de biodiésel a Europa permanecían paralizadas, porque la Comisión Europea abrió una investigación por dumping y subsidios en la industria nacional. Esa medida provocó que la Argentina sufriera la aplicación de aranceles aduaneros del orden del 30%.