Racing, campeón del fútbol argentino, se resignó anoche a un empate sin goles como local frente a un conservador Unión de Santa Fe en el partido apertura de la Superliga Argentina de Fútbol (SAF) 2019/20.
El equipo de Eduardo Coudet buscó la victoria con ambición pero chocó sistemáticamente con la defensa santafesina y no pudo cambiar las sensaciones que le dejó la eliminación de la Copa Argentina ante Boca Unidos de Corrientes, el pasado domingo.
Sin complejos, el equipo santafesino se paró en cancha con cinco defensores y bloqueó todos los caminos de ataque para Racing, que tuvo un comienzo de partido prometedor. En apenas 20 minutos, el local había llamado tres veces la atención sobre el arco defendido por Sebastián Moyano, que tuvo una guardia infranqueable con sus zagueros. Dos veces Jonathan Cristaldo y otra el paraguayo Matías Rojas estuvieron cerca de la apertura del marcador en lo que perfilaba como un buen partido por parte de Racing, dueño absoluto del desarrollo del juego. El campeón juntaba sus líneas, recuperaba rápidamente el balón y se desplegaba en ofensiva para abrir el cerrojo rival.
El libreto de Unión se limitó a esperar y tratar de sorprender al rival con una pelota parada o alguna contra, aunque la disposición de Franco Troyansky como único punta definido atentó contra esa posibilidad.
No obstante, el "Tatengue" tuvo sus opciones con una aparición de Ezequiel Bonifacio, que estuvo cerca de conectar de cabeza, y un disparo del colombiano Gómez Andrade.
Racing acentuó su búsqueda con el correr de los minutos y al mismo tiempo desnudó su defecto de los últimos partidos: la falta de contundencia en el arco rival.
Los cambios ofensivos dispuestos por Coudet en el segundo tiempo no fueron suficientes para terminar con la impotencia de un equipo lanzado al ataque con desesperación en el tramo final del partido.
Fue en ese momento cuando los pilares defensivos de Unión, Bottinelli y Gómez Andrade, acrecentaron su figura con devoluciones de cabeza y cruces certeros en las cercanías del arco de Unión.
Ya en tiempo de descuento, casi en la última jugada de la noche, el que se lució fue el arquero Moyano, que enfrentó en un mano a mano a Darío Cvitanich y tapó su remate con el hombro y el cuello.
En ese instante, Racing sintió la resignación por dos puntos que terminaban de escaparse y Unión festejó el premio a su conmovedora resistencia.
Racing visitará por la segunda fecha a Vélez, en el José Amalfitani.
Claves
Dominio
Racing fue el que tuvo claramente el control del balón durante la primera etapa y se aproximó más al arco visitante en Avellaneda, aunque sin claridad.
Firme
Unión, por su lado, estuvo bien compacto atrás y generó algunas situaciones como para marcar ya en el complemento. Igual, el empate le sentó muy bien.
Dedicación
Luego de la eliminación en la Copa Argentina, en este semestre Racing sólo afrontará el torneo doméstico por lo que apuesta todo a estar bien alto.