En la mañana de este sábado se realizó la audiencia de formalización y control de detención de Eduardo Maximiliano Varela, de 28 años, quien se desempeñaba en el área de Adjudicaciones del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) y está siendo investigado por estafa.
El hombre, que fue detenido el pasado 27 de enero luego de que la Policía realizara cuatro allanamientos, se presentó ante la jueza de Garantías Celia Maldonado, quien definió la prisión preventiva del acusado por cuatro meses y el plazo de un año de investigación penal preparatoria.
Como consecuencia, Varela, que se encontraba alojado en la Central de Policía, será trasladado al Servicio Penintenciario de Chimbas.
Cabe destacar que, durante la audiencia, el fiscal del caso, Francisco Micheltorena, había pedido 6 meses de prisión preventiva. Mientras que, la defensa, a cargo de María del Valle Torres, se había negado considerándolo excesivo y había ofrecido una fianza, sin indicar el monto.
Varela está acusado de cobrar importantes sumas de dinero para adjudicar casas del IPV a distintas familias. Hasta el momento, la UFI Delitos Especiales logró el testimonio de unos 10 damnificados que indicaron haberle entregado desde 100 mil, 150 mil, 260 mil y hasta 300 mil pesos.
Las fuentes explicaron que se encuentra en análisis si Varela realizó la misma maniobra a vecinos de Jáchal, tras cumplir tareas del IPV en ese departamento.
En el caso de los denunciantes, se confirmó que el contratado tomaba contacto con los damnificados, luego de que estos se acercaran al Centro Cívico a realizar distintos trámites en el IPV. Así, aprovechándose de sus funciones, los convencía de entregar los montos para asegurarles ser adjudicatarios.
Luego de que la noticia saliera a la luz el caso, Varela se ausentó de su puesto de trabajo, como imaginando las denuncias que finalmente recayeron en su contra. Finalmente, lograron detenerlo en el domicilio de su suegro, en Calle 14 y Vidart, en Pocito.