
La primera y única presentación de Raffaella Carrá en San Juan generó una verdadera conmoción. Ocurrió justo en uno de los picos artísticos de la cantante italiana y en plena dictadura militar, el 28 de septiembre de 1979. Hoy, al conocerse la noticia del fallecimiento de la artista a sus 78 años, los recuerdos de aquella visita regresaron a la memoria.
La presentación de la blonda se vivió como una verdadera revolución en San Juan. El movimiento que generó fue tal que incluso se decidió modificar aspectos del estadio cubierto Aldo Cantoni para mejorar su acústica y que quedara perfecta sólo para ella. A la vez, un equipo técnico internacional llegó a la provincia para armar el escenario y disponer las luces bajo las cuales se presentaría la estralla mundial.
Mientras tanto, las entradas, que costaban 10 mil pesos de esa época, se vendían como pan caliente en la portería de Radio Colón.
Finalmente aquel 28, Raffaella llegó al aeropuerto de Las Chacritas. La expectativa llevó a cientos de sanjuaninos a armar una caravana para acompañarla hasta la Ciudad, más precisamente a la puerta del Hotel Nogaró, donde pasó su estadía en la provincia.

Y ella, ni bien llegó, ofreció con toda su simpatía y simpleza una conferencia a la prensa local en el Salón Azul de ese hotel. “Estoy emocionada con esta acogida. Por poder observar a esos escolares pequeños que dieron ese afecto que enaltece y que da ganas de seguir haciendo cosas mejor”, resaltó la rubia.
A la vez, confió que estuvo dos meses preparando el show que brindó en la Argentina y que fue el armado de la coreografía lo que más tiempo le demandó.
Ya por la tarde comenzó a verse el movimiento en el Estadio, que la cantante pudo repleto desde su salida al escenario, a las 21 en punto. Ella desplegó toda su magia y bailó sin pausa, abrazada por los coros de la gente.
Luego de descansar en la provincia, se movilizó a hasta Mendoza para continuar su gira por el país.
