River arrancó mejor, pero no pudo generar demasiadas ocasiones de gol para inquietar a Ezequiel Unsain. Solo Nacho Fernández tuvo una muy clara, pero su definición se fue desviada. Defensa y Justicia planteó un partido equilibrado, sin temores. Y cuando encontró la chance para golpear de arranque, lo hizo a través de un gol de Juan Martín Lucero.
Para el segundo tiempo, Marcelo Gallardo mandó a la cancha a Juanfer Quintero y River reaccionó. El colombiano le cambió la cara al equipo y puso el empate de penal. La infracción la generó Nicolás de la Cruz. River salió decidido a empujar y presionar a Defensa para volver a ser el líder de la Superliga en soledad. Pero no pudo quebrar el arco de Unsain para ganar el partido.
Cuando terminó el partido, Gallardo se quedó mirando pensativo. El técnico de River no quiso hablar en el campo de juego y se lo vio notablemente molesto. Mientras se iba de la cancha, le hizo gestos a la tribuna para que los hinchas alentaran y le dieran su apoyo al equipo de cara a la fecha final contra Atlético Tucumán.
Con el empate, River vuelve a ser el líder en soledad de la Superliga, pero ahora solo con un punto de ventaja. Si el próximo sábado, en Tucumán, River le gana a Atlético, será el campeón de la Superliga más allá de lo que haga Boca. El equipo de Gallardo también tiene chances de dar la vuelta en caso de no ganar, pero ahí dependerá de la ayuda del Gimnasia de Maradona.