Tal cual dice uno de los versos de la canción de Marco Antonio Solís, el espejo refleja con precisión a veces incómoda, no sólo nuestra figura sino también nuestro estado de ánimo. El espejo para una gestión pública son las encuestas. El gobierno de Alberto Fernández comienza el nuevo año con diferencial de imagen negativo, esto es cuando la imagen negativa supera a la positiva. Por su dimensión la situación aún no es grave, 35 a favor, 36 en contra, pero la caída, en lo que va de enero a enero ha sido del 10% en la positiva (venía del 45 en 2020) y la suba de la negativa fue del 11% (del 25 al 36 en 12 meses). Es como cuando los análisis de laboratorio dan mal aunque con margen de recuperación, tanto sea por la condición general del paciente como por su edad. Todos estos datos son coherentes con los resultados económicos y sociales, recesión, desempleo, pobreza, indigencia, inseguridad.

Alberto comienza mal el año en las encuestas. En San Juan nace el PRO Federal. 

Una administración que recién nace tiene a su favor el tiempo, "que vengan días", solía repetir un viejo político sanjuanino. En ocasiones una erosión al principio puede ser lógica, por ejemplo cuando se pagan los costos de grandes reformas que suelen ser antipáticas en el comienzo. Lo dramático, todavía no trágico, es que no se ha practicado ninguna reforma, ni estructural ni secundaria, sólo se ha ido administrando la realidad según ha ido apareciendo. Es probable que la ausencia de un plan sea consecuencia de la ausencia de un diagnóstico, que es como salir a la cancha formando un equipo sin saber contra quién se juega, subordinar todo a la improvisación, a la inspiración ingenua, a la ignorancia de lo que se va a enfrentar. Ganar o empatar en esos casos depende de que todo salga a favor, y eso pocas veces ocurre. En este espejo de la consultora Poliarquía de Alejandro Catterberg hay algunos datos que podríamos haber anticipado sin método sociológico: "La influencia de Cristina perjudica al Gobierno nacional". No hace falta más que verificar las recientes contradicciones gruesas, como en el ajuste jubilatorio, la ley de presupuesto o la negociación con el FMI. El 54% de los más de mil encuestados en todo el país opina así. La caída fuerte de la imagen general coincide con las apariciones contundentes de la expresidente tanto en la carta contra la Suprema Corte de Justicia como con el discurso en que sugirió a los ministros faltos de coraje "buscarse otro laburo". Nunca antes se conoció a un/a vice mostrar semejante supremacía política, al menos públicamente y con el Presidente al lado. Algo interesante es que la baja en la consideración positiva del Gobierno fue grande entre los votantes del Frente para Todos, el 13%. Si bien muy pocos votantes de Juntos por el Cambio venían aprobando al Gobierno en su gestión, apenas un 11%, este número también bajó a 9%. Entre los oficialistas no cristinistas la aprobación bajó mucho más, el 20%. Se dividen más o menos en cuartos, alrededor del 25%, quienes piensan que quien toma las decisiones es Cristina y Alberto obedece, otro tanto que quien manda es Alberto, otro cuarto que entre ellos luchan y el último cuarto que comparten las decisiones pacíficamente. Más allá de otros problemas de la gestión, aquí los antipáticos números parecen decir que lo difícil para Alberto es vivir con Ella.

Comienza a prepararse la contraofensiva de la oposición en busca de un acuerdo amplio.

Del otro lado comienza a prepararse la contraofensiva de la oposición en busca de un acuerdo amplio con peronistas no kirchneristas, el objetivo son las legislativas de fin de año. Miguel Ángel Pichetto, Ramón Puerta, el ex Vice de Néstor en Santa Cruz Eduardo Arnold y otros ya vienen realizando reuniones en Buenos Aires. La coalición en formación se llamaría Alianza Republicana, que integrarían el nuevo PRO Federal, la Coalición Cívica, la UCR y otros miembros actuales del Frente para el Cambio a quienes podrían sumarse peronistas que admiten la división de poderes como uno de los pilares de la democracia. En nuestra provincia ya han comenzado los diálogos y se espera la pronta visita del senador Humberto Schiavone, artífice del PRO Federal a nivel nacional y alter ego de Macri, quien inauguraría una nueva sede partidaria por fuera de la estructura formal del PRO en San Juan. Como se sabe, el diputado Eduardo Cáceres, actual conductor, está de licencia en la Cámara nacional, no pasa por un buen momento en su vida privada y arrastra en esa situación a Enzo Cornejo, titular formal del PRO. El espejo en que nos miramos puede servir para pensar cómo mantenernos si estamos bien o recuperarnos si estamos mal, siempre que queramos ver la realidad y no el reflejo de nuestros propios deseos. La pandemia ha afectado, pero no a todos por igual. A quienes han pretendido controlar la situación haciéndose responsables de la conducta ajena militarizando la calle o prohibiendo actividades cuando no eternizando el encierro les ha ido mal. A quienes sugirieron conductas pero dejaron el control en manos de cada ciudadano, les ha ido mejor, una muestra son Rodríguez Larreta en Ciudad de Buenos Aires o Sergio Uñac en San Juan. La caída brutal de la macro, pero sobre todo de la microeconomía ha sido causa inevitable de la fealdad de rostro que devuelven algunas imágenes, sobre todo cuando la salud igual se ha visto resentida y el sistema hospitalario se ha exigido al límite. Cristina mantiene un núcleo duro de adherentes del 25% y si se suma a los peronistas no kirchneristas aun el Frente de Todos mantendría una leve ventaja sobre la oposición de Juntos por el Cambio, lo que dejaría la cuenta final en manos de un porcentaje alto de independientes muchos de los cuales pretenderán este año electoral, comer asado, llenar la heladera o proteger a los jubilados, algo que no se supo o no se pudo hacer en 2020. Esta es la primera devolución que muestra el espejo de 2021.