La Unidad de Información Financiera (UIF) el organismo antilavado que depende del gobierno nacional le pidió al juez Claudio Bonadio que abra una investigación por el delito de lavado de dinero contra los involucrados en la fase original del Caso Cuadernos y que los llame a indagatoria.
La UIF, que es querellante en el Caso Cuadernos, solicitó que se abriera una investigación por lavado de dinero contra los ex funcionarios y empresarios de obra pública que fueron imputados inicialmente en el caso judicial que se inició a partir de las revelaciones del chofer Oscar Centeno. La UIF pidió las indagatorias de, entre otros, de la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, y de los empresarios Paolo Rocca (Techint), Marcelo Mindlin (SACDE) y Angelo Calcaterra, primo del presidente Maurcio Macri, quien fuera dueño de la firma IECSA.
La UIF, según la presentación a la que accedió Infobae, señala que: "En efecto, la hipótesis de lavado de activos que proponemos sea investigada en esta causa, se genera principalmente a partir de sostener que la organización ilícita conformada para sustraer los fondos públicos a partir de la concertación en las contrataciones perjudiciales, desde ab initioideó los planes relacionados con el destino que le daría al dinero generado por los sobreprecios pagados por el Estado en la obra pública cartelizada. Es claro que el circuito o derrotero de esos pagos ilícitos -sobreprecios- deben ser investigados como hechos inescindibles del plan original de la asociación ilícita. Así las cosas, los sobreprecios pagados ingresaban al ámbito de disposición de los empresarios, para luego ser destinados a: 1) el financiamiento de campañas políticas, 2) el enriquecimiento ilícito de los funcionarios y 3) el enriquecimiento personal de los intermediarios y empresarios involucrados en las maniobras". Para la UIF no solo hubo coimas, también se ingresó el dinero ilegal al circuito legal y por eso pide una investigación por el delito de lavado de dinero.
En la misma presentación la UIF detalló las cuentas en el exterior que se halló mediante información de inteligencia de varios de los empresarios involucrados en la maniobra. Según la UIF se detectaron cuentas en el exterior de los empresarios Aldo Roggio, Carlos Wagner, Enrique Pescarmona, Juan Carlos De Goycoechea, Jorge Neira, Claudio Glazman y Héctor Zabaleta. Buena parte de las cuentas detectadas se hallan en Suiza y hay otras en Estados Unidos, Islas Vírgenes Británicas, Panamá, Liechtenstein, Uruguay, Lucemburgo y el principado de Mónaco.
La UIF también consignó en su pedido que la Administración de Ingresos Públicos (AFIP) informó en el expediente que varios de los imputados se adhirieron a varios blanqueos de capitales (antes y durante este Gobierno) previamente a que se destapara el Caso Cuadernos. El organismo que encabezan Mariano Federici y Eugenia Talerico consideró que el blanqueo realizado por los imputados forma parte de la maniobra de lavado de dinero que denunciaron.
El pedido de apertura de la causa por lavado de dinero fue revelado esta mañana por el diario La Nación en su página web. Pero además esa solicitud incluye un listado de 68 personas a las que la UIF les pidió la indagatoria en la que se hallan, entre otros, el ex ministro de Planificación Julio De Vido, el ex subsecretario Roberto Baratta, el ex jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina, el ex secretario de Obas Públicas José López, el ex secretario General de la Presidencia Oscar Parrilli, Claudio Uberti y los empresarios a los que se les detectó cuentas en el exterior. En el listado figuran también otros hombres de negocios como Luis Betnaza, Néstor Otero, Gabriel Romero, Alberto Tasselli, Gerardo Ferreyra, Héctor Sánchez Caballero y Alberto Padoán, entre otros.
La UIF pidió que se dicten medidas cautelares para congelar los fondos de las cuentas detectadas para luego decomisar el dinero con vistas a su recuperación.
Algunos de los que la UIF quiere que sean indagados declararon en el Caso Cuadernos como arrepentidos y confesaron haber pagado o cobrado coimas. Otros están detenidos, casi todos ellos procesados y otros recibieron una falta de mérito en la causa original. La UIF no hizo distinciones y solicitó que todos los que aparecen en la maniobra inicialmente investigada sean llamados a indagatoria por lavado de dinero.