Sin sorpresas, el Ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, anunció que en el segundo trimestre del año se sobrecumplió la meta fiscal. El déficit primario -el resultado de los ingresos y egresos antes del pago de la deuda- fue de 1,5% del Producto Bruto Interno (PBI) en el primer semestre del año,0,5 puntos porcentuales por debajo de la meta prevista para el periodo.

 

Así, en los primeros seis meses del año, el Gobierno acumuló un rojo de $ 144.286 millones, $ 50.714 millones por debajo de los $ 195.000 millones establecidos en las metas fiscales. Y es que los gastos crecieron en el semestre al 31%, contra un tasa de crecimiento de los ingresos del 32 por ciento. En tanto que el déficit financiero -luego del pago de la deuda- fue de 2,5% a junio (la meta del año es del 6 por ciento).

 

"La meta del año es como máximo, un déficit de 4,2% para todo el año. Vamos a cumplirla y haremos un esfuerzo por sobrecumplirla también", aseguró Dujovne, en conferencia de prensa, quien admitió que, considerando que la inflación interanual fue en el periodo del orden del 28%, el gasto "está creciendo apenas en términos reales", pero anticipó que tendrá una tasa de crecimiento menor en el segundo semestre.

 

En gran medida, los números del primer semestre estuvieron apalancados por mayores ingresos gracias al blanqueo -en el semestre sumaron $ 43.000 millones al Tesoro-, y por menores gastos sobre todo en subsidios energéticos y en otros bienes y servicios. Estos últimos, dijo Dujovne, "tiene que ver con un montón de programas no sociales y con la administración día a día del gasto público en la compra de bienes y servicios, donde generamos por segundo año un ahorro considerable, con licitaciones trasparentes". También incluye el menor déficit de las empresas públicas, cuyo rojo cayó en el semestre 27% en términos nominales, y más del 40%, en términos reales.

 

Un tipo de cambio menor al presupuestado -de 18%, promedio para el año-, y un clima más benigno contribuyeron a que el gasto en subsidios energéticos fuera menor al presupuestado incluso. Lo que ayudó a compensar el crecimiento mayor, en términos relativos, de los subsidios al transporte, dado que en el presupuesto estaba previsto una ajuste de tarifas que no se hizo.

 

A tono con las elecciones y los esfuerzos del Gobierno por reactivar la economía, en el semestre hubo fuerte crecimiento del gasto de capital, en particular, en transporte (+ 62%) y vivienda (+66%), y en educación (+155%), por la inversión en jardines de infantes.

 

Más de la mitad del gasto del semestre, sin embargo, lo explican las prestaciones sociales. En jubilaciones y pensiones se pagaron $ 423.333 millones (+41%), mientras que en otros programas sociales y prestaciones -pensiones no contributivas, el plan Progresar y Argentina Trabaja, entre otros- se destinaron $ 110.297 millones (+39%). El Plan de Reparación Histórica, detallaron desde Hacienda, representó en el segundo trimestre unos $ 15.000 millones al gasto en jubilaciones y pensiones.

 

 

Mientras que entre los gastos corrientes se destaca en el semestre un fuerte crecimiento del 195% las transferencias a provincias. En gran medida, la erogación de $ 47.041 millones corresponde en este caso al aumento del Fondo de Incentivo Docente y al financiamiento de las cajas previsionales de las provincias, que se había cortado en el Gobierno anterior, y que la actual gestión reactivó en el segundo semestre del año pasado.

 

En los primeros seis meses del año, destacó Dujovne, el Gobierno lleva ejecutado el 47% del gasto presupuestado. Para el segundo semestre, adelantó, se espera ejecutar el 57% restante, pero que la tasa del gasto crezca sólo un 5% versus el 31% del primer semestre. "La tasa de crecimiento es menor, pero no responde a una pisada de caja -subrayó el Ministro-, sino a que la planificación presupuestaria este año es muy pareja en todo el año". El año pasado, el Gobierno pisó el gasto en la primera parte del año, hasta que logró poner a punto -y transparentar- la situación de varias administraciones y ministerios que en el Gobierno anterior habían gestionado el gasto con poco o casi sin control. Por lo que luego, en el segundo semestre se concentró gran parte del gasto del año.

 

Para Marina Dal Pogetto, directora del Estudio Bein, era de esperar que el Gobierno cumpliera con la meta del trimestre, como también es esperable que lo haga en el tercero. "Pero no sé si podrán hacerlo en el cuarto. La meta para el primero era holgada; para el segundo, también; y para el tercero, más o menos", dijo la economista, quien alertó que "la dinámica de los recursos viene lenta".