El delantero Stijn Spierings del Sparta de Rotterdam protagonizó un llamativo momento en los minutos finales de la segunda ronda de los playoffs que decretará un puesto de ascenso en Holanda. El futbolista de 22 años intentó despejar un balón de una jugada que se produjo a 40 metros de su arco.

 

Los dirigidos por Dick Advocaat ganaban por 1 a 0 a falta de 2 minutos para el finalcuando ocurrió la desafortunada acción que emparejó el marcador. Para amortiguar la culpa del jugador, el equipo visitante logró convertir antes de que termine y ahora esperan el encuentro de vuelta con un resultado favorable.

 

 

 

La jugada se produjo a los 88 minutos, cuando el atacante, al parecer, intentó hacer rebotar la pelota en su rival con un potente disparo. Éste sin embargo, no tocó al jugador de Dordrecht y fue directo al arco que defendía su compañero Roy Kortsmit, a casi 40 metros. 

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El portero holandés, al interpretar que estaba recibiendo un pase, no utilizó las manos y quiso despejar la pelota con la cabeza sin poder conseguirlo. El tanto significó el empate de los locales y un milagro para reponerse e intentar lograr el ascenso a la Eredivisie.

 

Finalmente, Robert Muhren pudo poner el resultado nuevamente a favor de Rotterdam al convertir a los 90 minutos, un desahogo para Spierings que fue protagonista de uno de los goles en contra más increíbles del año.