El músico Luciano Emilio Juan Napolitano, hijo del fallecido rockero Pappo, cumplirá esta semana un año preso en el marco de una causa por violencia de género en la que está acusado de haber golpeado, amenazado y dejado encerrada en su casa de la localidad bonaerense de Benavídez a su última pareja, y cuya elevación a juicio fue impulsada por la fiscalía, pero está apelada por la defensa, informaron este sábado fuentes judiciales.
Napolitano (47) está cumpliendo prisión preventiva en la Unidad 9 de La Plata, donde según él mismo anunció a fines de marzo en una red social con un video y un comunicado, formó una nueva banda de rock, un "power trío" bautizado H6 –por el sector y la celda que ocupan en el penal-, donde él es el cantante y guitarrista y lo acompañan un bajista y un baterista, que también son internos en la misma prisión del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB).
Incluso, en el perfil de Facebook "Luciano Napolitano Rock", hay subidos algunos videos de la banda ensayando en la cárcel o el videoclip de "El carro de John", uno de los temas de H6 dedicado a un interno del penal.
En relación a su causa judicial, el fiscal Pablo Menteguiaga, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Violencia de Género de Tigre, requirió a fines de marzo la elevación a juicio de Napolitano por dos hechos de violencia de género contra su entonces pareja, Mariel Oleiro (34).
Por el primer hecho –el que motivó hace un año su detención-, Napolitano quedó imputado por los delitos de "lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género en concurso real con amenazas, privación ilegal de la libertad agravada y tenencia ilegítima de arma de guerra" y, por el segundo, ocurrido unos meses antes, por "amenazas agravadas por el uso de arma".
Una fuente judicial explicó a Télam que sumando las penas máximas de todos esos delitos y de ambos hechos, la fiscalía podría llegar a pedir en el futuro juicio oral una pena de hasta 19 años de cárcel, aunque al no tener antecedentes condenatorios, lo más probable es que la eventual sentencia sea por menos años.
El hecho
El hecho ocurrió la tarde del 24 de mayo de 2021, en la vivienda que el hijo del fallecido Norberto "Pappo" Napolitano compartía desde hacía cuatro años con su pareja Oleiro, situada en Jujuy 3452, de la localidad de Benavídez, partido de Tigre, en el norte del conurbano.
De acuerdo a la denuncia de la mujer, todo se inició cuando le pidió a Napolitano las llaves de la camioneta para ir a comprar comida para sus mascotas y él comenzó a insultarla y agredirla físicamente, todo delante de dos de las hijas del imputado de 7 y 13 años.
En su requerimiento de elevación a juicio –al que accedió Télam-, el fiscal Menteguiaga describió así el inicio de las agresiones: "Comenzó a hostigarla, humillarla y denigrarla para luego valiéndose de su condición de género tomarla del cuello apretándolo fuertemente hasta provocarle dificultad para respirar mientras le refería dichos amenazantes tales como "te voy a matar hija de puta, te voy a matar".
La denunciante contó que su pareja la tomó del cuello, que la agresión incluyó trompadas y patadas, que le apretó un ojo, que también la roció con alcohol, que en el patio de la casa intentó atropellarla con una camioneta Volkswagen Amarok y que la dejó encerrada sin poder salir de la propiedad y con la única posibilidad de estar en el quincho hasta que al día siguiente logró llamar al 911 y fue rescatada por la policía.
La detención de Napolitano
Napolitano fue detenido el 26 de mayo a la madrugada y en su vivienda se realizó un allanamiento en el que se secuestró el revólver 38 cargado, del cual no tiene permiso de tenencia ni portación.
Al ampliar su declaración, Oleiro denunció a Napolitano por un episodio previo –que terminó siendo el Hecho 2 de la imputación-, ocurrido el 21 de noviembre de 2020, en la casa de la madre del acusado, en la calle Juncal al 1300 de Tigre, donde le partió un cuadro por la cabeza y luego la amenazó de muerte colocándole en la cabeza el revólver calibre .38 que le secuestraron en su domicilio.
"Él empezó a tirar todas mis cosas a la calle. Fue el mismo día que me partió el cuadro en la cabeza, me tiraba todo a la calle y me cagó a trompadas. Después me apuntaba con el arma, con la 38, y me decía que me iba a matar. Yo lo llamé a mi hermano para contarle lo que pasaba y ellos me vinieron a buscar", relató Mariel sobre aquel episodio, según consta en la causa.
El fiscal destacó los informes del Centro de Asistencia a la Víctima, en los que se evaluó a la situación como de "altísimo riesgo" y se reporta que Oleiro "se encontraba en una situación de violencia de género, bajo la modalidad de violencia de tipo psicológica en forma preponderante, con escalada abrupta a la violencia física".
Al ser indagado, Napolitano dio una versión totalmente opuesta a la de su entonces novia, ya que dijo que se trató de una discusión de pareja, que ella fue quien lo agredió a él, que el arma de fuego que estaba en su casa la heredó hace 15 años de su papá y que la mujer conocía cómo salir de la propiedad, algo que se desacreditó en la causa con el testimonio de los policías que auxiliaron a la víctima.
El actual defensor del hijo de Pappo, el abogado Roberto Casorla Yalet, se opuso al requerimiento de la fiscalía, planteó el sobreseimiento de su cliente y, subsidiariamente, que se baje la calificación penal a la de "privación de la libertad".
Todos sus planteos fueron rechazados por el juez de Garantías 5 de San Isidro, Diego Martínez, quien además avaló el requerimiento fiscal y elevó a juicio oral la causa.
Sin embargo, Casorla Yalet apeló esta resolución y ahora se espera que la Sala III de la Cámara de San Isidro defina si el expediente está para que Napolitano vaya, o no, a juicio oral.