Si bien la fecha precisa será tratada hoy por el Jurado de Enjuiciamiento, que conduce el cortista Daniel Olivares Yapur, fuentes calificadas indicaron que el juicio de destitución contra el juez Pablo Flores, titular del Segundo de Instrucción, se llevará adelante a fin de mes. Incluso, el lugar está definido. El debate oral y público se realizará en el Concejo Deliberante de la Capital, en horario de tarde. La elección de ese edificio se debe a que en el recinto se puede dar cumplimiento de las medidas de distanciamiento impuestas por el Ejecutivo debido a la pandemia del coronavirus, indicaron las fuentes. El proceso contra Flores tiene como fin que el magistrado pierda sus fueros para que sea indagado en la Justicia Penal por la entrega irregular de un vehículo al comisario Gustavo Padilla, exjefe del Depósito Judicial, quien lo usó para fines personales.
Será la cuarta vez que el Concejo Deliberante de la Capital se convertirá en sede de un juicio de remoción contra un magistrado. Quienes pasaron por ese reducto fueron Javier Cámpora en 1994, Carlos Reinoso en 1997 y Carlos Macchi en 2013, quienes resultaron apartados de sus cargos. Con respecto al caso de Macchi, este mes se cumplen siete años del proceso de destitución.
Según había indicado el cortista Olivares Yapur, el Jury llevará adelante hoy una reunión en la que analizarán la acusación que formuló el fiscal General, Eduardo Quattropani, y el documento de defensivo que planteó Flores. Los miembros del tribunal proveerán la prueba presentada, esto es, definirán cuáles serán utilizadas en el debate. Según trascendió, tanto el fiscal General como el juez solicitaron como testigo a un empleado judicial, trabajador que desempeña tareas en el Segundo Juzgado de Instrucción. También pidieron que Juan Pablo Ortega sea otro de los testigos. Este último, como juez provisorio, fue quien denunció a Flores, a instancias del pedido de la fiscal Claudia Salica, ya que ambos entendieron que había que investigar penalmente el vínculo entre el magistrado y el comisario Padilla, quien era el jefe del Depósito Judicial y fue procesado por utilizar una Toyota 4×4 secuestrada para "uso exclusivamente particular", al punto de que estuvo paseando con amigos por la montaña y en el campo, señala la resolución.
Además de la prueba, el Jurado definirá qué día se llevará adelante el Jury, lo que será antes de que finalice agosto, confirmaron fuentes del caso.
Flores había intentado zafar del proceso al pedir que no se lleve adelante el juicio. El juez había esgrimido problemas de salud, al punto de presentar tres certificados médicos, uno cardiológico, uno psiquiátrico y otro psíquico. El tribunal rechazó el planteo al indicar que, según el procedimiento, no es necesario que el acusado esté presente en el debate, ya que un defensor Oficial puede asumir su defensa, y porque los certificados hablan de reposo laboral, pero no que esté impedido de ejercer su derecho a defensa. Con la negativa, el proceso continuó su rumbo.
La causa contra Flores no será lo único que analizará el Jurado de Enjuiciamiento. Bajo la presidencia del cortista Juan José Victoria (ya que Olivares Yapur se excusó de participar en dichos procesos), el Tribunal definirá si admite o no las denuncias contra Héctor Rollán, titular del Primer Juzgado Civil, y Adriana Tettamanti, al frente del Juzgado Contencioso Administrativo. Ambos magistrados presentaron ante el Jury el primer informe de defensa.
Suspensión
Tras la acusación del fiscal General, Eduardo Quattropani, el Jurado de Enjuiciamiento resolvió suspender a Flores de su cargo mientras dure el proceso en su contra. La medida fue para evitar que el juez tome contacto con la prueba y con testigos. Por otro lado, el magistrado está ausente desde octubre de 2019.