El Mundial de Rusia 2018 ya está en marcha. El puntapié inicial deportivo lo dieron Rusia y Arabia Saudita pero antes hubo una gran fiesta de inauguración con mucho color y música para dar apertura al torneo más prestigioso a nivel naciones, ese que todos los fanáticos esperan durante cuatro años. "Deseo éxitos a todos los equipos y emociones inolvidables a los aficionados", proclamó el presidente ruso, Vladimir Putin, antes del inicio del partido. Pero antes hubo festejos y un despliegue escenográfico muy interesante.
La primera aparición rutilante en el césped del Estadio Olímpico Luzhniki fue la de Iker Casillas, quien presentó la Copa del Mundo en compañía de la modelo rusa Natalia Vodiánova. Ambos ingresaron con un cofre y el guardameta que fue campeón con España en Sudáfrica 2010 fue el encargado de mostrar el trofeo ante las gradas.
Una vez que los protagonistas liberaron el terreno, el campo de juego se transformó en una escenario gigantesco y la fiesta comenzó. Apareció el exfutbolista brasileño Ronaldo junto con el cantante Robbie Williams, quien inició su actuación con la canción "Let Me entertain You".
Luego se mostró Aida Garifullina -que a los 31 años ha conquistado la Ópera de Viena-, y el Estadio Olímpico Luzhniki ya vibraba al ritmo de "Feel" y la alegría creció cuando ambos cantaron "Angel". Las banderas de las 32 selecciones participantes comenzaron a desfilar mientras ambos artistas entonaban sus melodías. La coreografía y la alegría del público generaron una atmósfera impresionante.
En medio de los bailes se hizo presente la embajadora del Mundial, la bella Victoria Lopireva, quien fue la encargada de llevar al centro del campo el esférico oficial Adidas Telstar 18.
El punto más álgido se vivió cuando comenzó a sonar "Rock DJ", ese famoso sencillo del cantante británico que causó sensación en el año 2000. Luego hizo un polémico gesto obsceno a cámara y así se cerró un breve pero simpático acto inicial que decretó el comienzo del certamen.
El brasileño Ronaldo, campeón Mundial 2002, acompañó en el simbólico saque inicial a la mascota del torneo, Zabivaka, y a un niño ruso que despertó la primera gran ovación de la jornada.
La producción del espectáculo estuvo a cargo del canal de televisión ruso Channel One y, una vez más, fue dirigido por Felix Mikhailov, la mente creativa que ha formado parte de las principales ceremonias celebradas durante todo el trayecto de la Copa Mundial de la FIFA 2018; desde el sorteo preliminar en 2015 hasta el acto de clausura previo a la final del 15 de julio.