La mala suerte, la ingenuidad o la propia torpeza le jugó en contra a un narcotraficante que ayer sufrió un desperfecto mecánico en su vehículo y que sin querer, mientras aparentemente esperaba ayuda, se durmió en el asiento al costado de una calle de Caucete. No imaginó que justo aparecería un oficial de Policía que primero paró a ayudarlo y después intuyó que algo raro traía. Él se puso nervioso y más se delató cuando enfrentó al uniformado para tratar de evadirse. Ese fue su final, porque el policía lo tiró al piso y, como era de esperar, no tardó en revisar el auto: en el baúl encontró 87 kilos de marihuana, 7 kilos de cocaína y 29.000 pesos, según fuentes policiales.
Así se dio el inesperado operativo antidroga de la Policía Comunal de Caucete que terminó con la detención de Sergio Miguel Bustos (30), revelaron las fuentes. Él es de Las Chacritas, 9 de Julio, y posee antecedentes por droga, ya estuvo en el Penal, dijeron. Se investiga si venía de afuera de la provincia o sólo había ido a buscar la carga a otro departamento. El sospechoso andaba en un Chevrolet Aveo del que no poseía documentación, pero se supo que está radicado en Santa Fe y no tiene pedido de secuestro.
La desventura de Bustos empezó ayer a la mañana cuando su coche tuvo un desperfecto y quedó varado en calle Enfermera Medina, entre Rastreador Calívar y Patricias Sanjuaninas, casi en la entrada a Caucete. Eran las 10.30. Y el oficial Jacobo Tello y el chofer Cristian Cabañez, del móvil comunal 6, pasaron por ahí y vieron el auto parado, con el capot levantado y a Bustos durmiendo en el asiento del conductor. El policía bajó a ver qué pasaba y despertó a Bustos, que ahí nomás se puso nervioso e intentó convencer al uniformado que se fuera. Tello sospechó de éste y le pidió la documentación. Bustos, como no tenía ni el DNI, le lanzó una trompada y el oficial lo manoteó y lo tiró al piso. Después pidió apoyo y, cuando revisaron el coche, se dieron con tamaña sorpresa.