El papa Francisco advirtió ayer de los "fenómenos extremadamente peligrosos" que amenazan a los
jóvenes en internet y pidió no desestimarlos y movilizarse sin miedo. Con autocrítica sobre el rol de la Iglesia, el papa Francisco aseguró que "ocultar los abusos a menores es un gravísimo error", alertó sobre "fenómenos extremadamente peligrosos" para los jóvenes en la web, como el denominado "sexting", y pidió hacerles frente sin "subestimar el daño que hacen", y considerando que "las soluciones técnicas automáticas no son suficientes".
"Debemos tener los ojos abiertos y no ocultar una verdad que es desagradable y que no quisiéramos ver", aseguró el Pontífice al recibir a 300 participantes de un congreso que durante toda la semana debatió en una universidad del Vaticano sobre los peligros del abuso infantil en internet.
"Por otra parte, ¿no hemos entendido demasiado bien en estos años que ocultar la realidad del abuso sexual es un gravísimo error y fuente de tantos males? Entonces, miremos la realidad tal y como la han visto en estos días", pidió el Pontífice de cara al grupo que integraba, entre otros, el sacerdote argentino Rubén Yáñez, miembro de la comisión anti-pedofilia instaurada por el Papa en 2013.
En ese marco, Jorge Bergoglio aseguró que "en la red se están propagando fenómenos extremadamente peligrosos" como "la difusión de imágenes pornográficas cada vez más extremas" o "el creciente fenómeno del sexting entre chicos y chicas que utilizan las redes sociales".
Entre esos fenómenos, el Papa argentino alertó también sobre "la intimidación que se da cada vez más en la red y representa una auténtica violencia moral y física contra la dignidad de los demás jóvenes; la sextortion; la captación a través de la red de menores con fines sexuales es ya un hecho del que hablan continuamente las noticias". "Hasta llegar a los crímenes más graves y estremecedores de la organización online del tráfico de personas, la prostitución, incluso de la preparación y la visión en directo de violaciones y violencia contra menores cometidos en otras partes del mundo", indicó incluso.
En este contexto, el santo padre mencionó la llamada "dark net" (red oscura) "donde el mal consigue actuar y expandirse de manera siempre nueva y cada vez con más eficacia y extensión