El papa Francisco suspendió todas las audiencias previstas para hoy, incluida la reunión con el canciller Santiago Cafiero, por "razones de salud", informó a Télam la oficina de Prensa del Vaticano.
El hombre de mayor confianza del presidente Alberto Fernández inició el domingo pasado una gira por Italia para visitar las ciudades de Milán, Venecia y Roma; y luego se trasladará a la India, donde mantendrá encuentros bilaterales con funcionarios y personalidades de ambos países, incluido el papa Francisco.
El plato fuerte del viaje era un nuevo cara a cara con el papa Francisco que iba a servir para volver a mostrar la sintonía del pontífice con muchas de las medidas a favor de los más necesitados que lleva adelante el Gobierno nacional.
Pero la salud esta vez pudo más que la voluntad del pontífice.
Según pudo saber Télam, el Papa continúa aquejado de los dolores en su rodilla derecha por los que ya se ha sometido a controles médicos para ver los pasos a seguir para su recuperación.
Francisco, de 85 años, arrastra el dolor en la rodilla derecha desde inicios de año y ya debió cancelar varias actividades en las últimas semanas.
El domingo, durante la bendición Urbi et Orbi que encabezó en Plaza San Pedro ante más de 100.000 fieles, no pudo leer todo su discurso de pie y debió sentarse en medio del mensaje pascual.
El sábado, en tanto, el dolor en la rodilla le impidió celebrar la ceremonia de la Vigilia Pascual en la basílica de San Pedro, por lo que se limitó a leer la homilía, bautizar a un grupo de personas y siguió la misa sentado en un sillón. Un día antes, Jorge Bergoglio tampoco pudo postrarse en el suelo de la basílica de San Pedro por la Pasión del Señor, durante el Viernes Santo, cuando la Iglesia recuerda el calvario y muerte de Cristo en la Cruz. A causa del dolor, el Papa debió además ausentarse de la procesión del último Domingo de Ramos, el 10 de abril.
El 3 de abril, al regresar de un viaje de dos días a Malta, el Papa planteó en conferencia de prensa que su salud "es un poco caprichosa". "Tengo este problema en la rodilla que provoca problemas de deambulación, en el caminar, es un poco molesto, pero va mejorando, al menos puedo andar. Hace dos semanas no podía hacer nada. Es algo lento; veamos si vuelve a estar como antes, pero está la duda. A esta edad no se sabe cómo terminará el partido, esperemos que vaya bien", aseveró entonces.
El 26 de enero, Francisco explicó por primera vez que tiene inflamado un ligamento en la rodilla que le obliga a reducir sus movimientos, aunque calificó a la dolencia como "algo pasajero". "Me han dicho que le pasa sólo a los viejos, así que no sé por qué me ha pasado a mi", planteó el pontífice durante la Audiencia General en el Vaticano poniendo algo de humor a su padecer.
La inflamación de rodilla le impidió al Papa hacer el tradicional saludo a los fieles presentes en el Aula Pablo VI del. Se limitó a darles la mano a los religiosos presentes en torno al escenario. A mediados de enero, Jorge Bergoglio ya había tenido que leer un discurso sentado ante un grupo católico por molestias en la pierna.