Boca Juniors comenzó con el pie derecho el ciclo de Sebastián Battaglia. Sin sobrarle demasiado, le ganó 1-0 al encumbrado Patronato, cortó la racha maléfica de 10 partidos sin triunfos y salió del fondo de la tabla de la Liga Profesional. Luis Vázquez, el nueve que subió desde la Reserva, marcó de cabeza tras centro de Exequiel Zeballos a falta de 5 minutos para el final, el único gol de la noche.
Patronato no salió a defenderse. Aún cuando no pudo monopolizar el manejo de la pelota, el conjunto visitante fue mucho más claro en sus intenciones ofensivas. En una primera parte en la que Boca exhibió las mismas falencias en la generación de juego que cuando Russo estaba al mando, el elenco de Paraná encontró los espacios para generar peligro y tuvo las mejores chances.
Una de las ocasiones más claras de la etapa inicial llegó sobre los 26 minutos, cuando Gabriel Gudiño sacó un remate de media distancia por lo bajo que Agustín Rossi logró mandar al córner. De ese tiro de esquina llegó la polémica: la pelota cayó en el área y el árbitro Silvio Trucco cobró una falta sobre Rossi cuando Leandro Marín lograba convertir el primer tanto de la noche. Fue un error del juez del encuentro ya que no existió tal carga sobre el guardametas del Xeneize.
