El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, está siendo nuevamente centro de todas las críticas tras hacer un chiste relacionado a la agresión sexuales a la mujeres de su país. 

 

El mandatario habló con la prensa sobre su ciudad natal, Dávao, en la que se registraron 42 violaciones en el segundo semestre de 2018, 10 más que las de Filipinas, la capital.

 

"Dijeron que Dávao tuvo muchos casos de violación. Mientras haya muchas mujeres hermosas, también habrá más casos de violación", afirmó en el distrito de Mandaue.

 

"¿Quién acepta hacerlo en la primera solicitud? ¿Lo permitirá la mujer? No", aseguró el presidente, explicando que, "incluso dentro del cine, ella lo apartará,y le dirá: ‘No, no lo hagas’". "Nadie acepta hacerlo en la primera cita. Eso es violación", agregó. 

 

Estas afirmaciones causaron un revuelo generalizado y rápidamente se hicieron virales por las redes sociales. 

Babae Ako, un movimiento por los derechos de las mujeres en el país asiático, condenó las palabras de Duterte afirmando que "hay una violación porque hay un violador, no por algo sobre la víctima".

 

Filipinas es uno de los pocos en su continente que mantiene la pena de muerte como condena máxima para narcotraficantes, criminales y violadores.