Algunas de las especies que habitan la zona este de San Juan estarán representadas en la obra. El desierto toma protagonismo ya que es el escenario que recorre la Difunta Correa en búsqueda del amor de su vida. De este modo se le da vida a lo inhóspito que durante el día es amable y a la noche se convierte en misterioso. Así la flora típica del lugar toma valor y se muestra a través de algunas especies tales como, retortuños, algarrobos, totoras, tunas, algarrobos, etc. Un repaso para estar a tono con las escenas.

Prosopis strombulifera – Retortuño
El retortón o retortuño (Prosopis strombulifera), también conocido como mastuerzo, es una especie arbustiva del género Prosopis que habita en regiones áridas de América del Sur. Crece también extendiéndose a partir de una red de largas raíces. Sus hojas tienen textura cerosa, y en el área basal de cada hoja presenta espinas blanquecinas. La inflorescencia es una cabezuela esférica con muchas flores amarillas en forma de tubo. Su fruto es muy característico: una vaina cilíndrica enrollada apretadamente, de color amarillo brillante. Este arbusto está perfectamente adaptado a la sequía (xeromorfo), a las sales, y a la arena, tolerando bien las heladas.

Opuntia ficus indica – Tuna

 

Es un cactus realmente resistente a la sequía, que además posea unas flores de colores muy vivos y cuyos frutos son muy deliciosos, su nombre científico es Opuntia. Estas plantas cactáceas poseen infinidad de espinas. Hoy se las utiliza mucho en jardines y parques por su valor ornamental. La O. ficus indica, u Opuntia máxima también conocida como palera, nopal, tuna, higo chumbo, chumbera y muchos otros nombres se la encuentra en toda América del Norte y del Sur. Tiene forma arbustiva, creciendo hasta algo más de 3m de altura, las hojas de estos cactus son grandes palmas ovoides. El fruto son los llamados higos chumbos, que es por lo que se la conoce por el nombre de chumbera o palera. Algunas de sus variedades son: Opuntia littoralis – Opuntia microdasys – Opuntia monacantha – Opuntia ovata – Opuntia tomentosa.

 

Larrea divaricada – Jarilla

 

En América del Sur se encuentran cuatro especies, las cuales se conocen como jarillas: Larrea ameghinoi (jarilla rastrera), Larrea nitida (jarilla fina o jarilla de la sierra), Larrea divaricata (jarilla hembra) y Larrea cuneifolia (jarilla macho). Las especies sudamericanas están fuertemente emparentadas entre sí y los híbridos interespecíficos son parcialmente fértiles.

Las jarillas son arbustos ramosos que se encuentran en zonas montañosas del oeste argentino. Todas ellas son importantes fuentes de combustible. Aparte de su utilidad como combustible, estas plantas tiene otros usos. La sustancia resinosa contenida en sus hojas se utiliza como medicina natural y para teñidos de lanas.

Prosopis alba – Algarrobo

El algarrobo pertenece a la familia de las Leguminosas, integrada por especies que producen frutos semejantes a una legumbre. En sus raíces suele propagarse una bacteria conocida como Rhizobium que se encarga de transformar el nitrógeno del aire por compuestos que pueden ser aprovechados como fertilizantes. Desde épocas ancestrales, se le han dado múltiples usos al algarrobo. Por su composición de proteínas, minerales, azúcar natural, fibras y complejos de vitamina B, se emplea para la elaboración de energizantes.

De su fruto se deriva una sustancia nombrada algarrobina, a la que se le atribuyen efectos medicinales.

La copa del algarrobo se asemeja a una sombrilla. Se extiende copiosa y rozagante hasta alcanzar unos 15 m de diámetro. De ella se desprenden cuantiosas ramas que se deslizan a sus anchas con su exuberante y verde follaje. Los frutos son una vaina compuesta por una pulpa endulzada y carnosa que toma una coloración marrón cuando se madura. Por dentro, albergan de 20 a 30 semillas aplanadas, ovoideas, rojizas y bastante sólidas.

Parkinsonia praecox – Brea

Chañar Brea, Palo Verde, Breña, es una Leguminosa de características arbóreas, que se encuentra desde la Argentina, hasta el desierto de Arizona en Estados Unidos. Se adapta fácilmente a suelos desérticos, degradados, con baja disponibilidad hídrica, y coloniza rápidamente el área. Se lo encuentra en zonas áridas o semi áridas. Alcanza un importante tamaño y posee un interesante valor melífero, ya que produce abundante polen y néctar. No es un árbol muy longevo, vive unos 20 a 30 años y llega a adulto rápidamente (3 a 5 años). Forma parte de las grandes unidades de vegetación de la flora sanjuanina y chaqueña.

Tillandsia aeranthos – Clavel del Aire 

Tillandsia aeranthos, llamado comúnmente clavel de aire o clavel aéreo, es una especie de planta epífita dentro del género Tillandsia, perteneciente a la familia de las bromelias, Se encuentran en los bosques y montañas de Argentina, Brasil, Ecuador, Paraguay y Uruguay.
Es una planta de hojas estrechas que crece desde niveles sobre el mar hasta en altitudes. Los nutrientes que necesita la planta los recolecta del aire (polvo, hojas que se caen y materia procedente de los insectos) a través de las estructuras en las hojas llamadas tricomas. Las especies de Tillandsia son epífitas, es decir en la naturaleza crecen normalmente sobre otras plantas, sin ser parásitos, y crecen fuera del suelo, encima de otras plantas, generalmente en árboles, o en rocas y acantilados. La reproducción está asegurada por los brotes que crecen alrededor de la planta madre, llamadas “hijuelos”. Una sola planta puede tener una docena de hijuelos que pueden ser quitados y cultivados por separado ó dejados junto con la planta madre, para formar una colonia.