Los mercados de Argentina operaban el lunes con una tendencia dispar en medio de dudas sobre el futuro económico y político del país, a menos de dos semanas de la elección legislativa de medio término en la que el oficialismo podría perder su liderazgo en el Congreso. Los bonos en la plaza extrabursátil local perdían un 0,3% en promedio, tras acumular la semana pasada una baja del 0,4% y del 4,2% durante octubre llevando al Riesgo País a máximos en más de un año.
En el exterior, todos los títulos globales en dólares argentinos mostraban bajas en el día que iban del 0,45% al 0,70%, según el plazo.
“A pesar de que el Gobierno viene cumpliendo con los vencimientos de este año, el mercado ve muy alejadas las negociaciones con el FMI. Sin un plan económico es poco probable que se llegue a un acuerdo para el 2022, año en el que losi los vencimientos ascienden a USD 19.000 millones”, dijo Mariano Marcó del Pont de Silvercloud Advisors.
El riesgo país elaborado por el banco JP Morgan subía 10 unidades, a un nivel máximo histórico de 1.722 puntos básicos. Este índice se reinició el 10 de septiembre de 2020 en la zona de los 1.083 puntos tras una millonaria reestructuración de deuda soberana. La reestructuración, sin embargo, no logró recuperar la confianza de los inversores en la deuda soberana argentina.
Los pocos avances en las negociaciones del país con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por una deuda de unos USD 45.000 millones ponen un nuevo manto de cautela entre los inversores, que se alejan de las inversiones de riesgo y buscan coberturas en dólares, coinciden analistas.
“La negociación (con el FMI) va avanzando con las dificultades que una negociación supone, porque hay muchos intereses en pugna”, dijo el presidente argentino, Alberto Fernández, a periodistas tras una reunión el fin de semana con la directora gerente del organismo, Kristalina Georgieva, en el marco de la cumbre del G-20 en Roma, sin dar mayores detalles.
Fernández y el ministro de Economía, Martín Guzmán, participaron en la reunión del G-20, donde buscaron apoyo en la negociación con el FMI.
“Hoy la realidad es que Argentina no tiene un plan económico y eso es lo que no está permitiendo avanzar en el acuerdo con el FMI”, dijo en declaraciones radiales el politólogo y analista internacional Juan Negri.
La aversión hacia el mercado argentino se refleja en una postura oferente de posiciones, un riesgo país en máximos históricos y una creciente dolarización de carteras.
El índice accionario S&P Merval subía un 3,13%, a 86.176,84 unidades tras perder un 2,87% el viernes y acumular una mejora del 8,01% en octubre. El referencial líder marcó el martes pasado un valor máximo histórico en pesos de 90.576,75 puntos.
“Creemos que la coyuntura política, la incertidumbre de cara a las elecciones y la situación cambiaria seguirán aportando volatilidad al mercado de renta variable”, dijo Portfolio Personal Inversiones.
En la plaza cambiaria, el peso interbancario se depreciaba un 0,11%, a 99,82/99,84 por dólar, en una plaza con liquidez controlada por el banco central (BCRA) con compras o ventas de dólares de sus reservas.
El viernes, el BCRA debió desprenderse de unos 290 millones de dólares de sus reservas para abastecer la demanda, recordaron operadores.
“El BCRA comienza noviembre con reservas netas (excluyendo DEG) por un estimado de USD 4.673 millones y reservas netas líquidas (excluyendo DEG y oro) de USD 1.112 millones, niveles extremadamente bajos que lo obligarán a cambios en la política económica desde el mismo 15 de noviembre”, señaló Porfolio Personal Inversiones.