
Por su ubicación geográfica y por las características de provincia montañosa, San Juan alberga varios sitios con aguas termales que no están siendo explotadas, por lo que el termalismo en sus facetas medicinal y turística es una asignatura pendiente que podría ofrecer una interesante propuesta a nivel nacional e internacional. Los más memoriosos aseguran que la provincia, en épocas remotas, supo contar con al menos 60 sitios con aguas termales. Quedaron una media docena de lugares reconocidos, aunque no todos cuentan con infraestructura apropiada para su explotación turística o terapéutica. Entre ellos está Pismanta, Talacasto, La Laja y Agua Hedionda, entre otros menos conocidos.
El mapa termal de la Argentina abarca unas 400 fuentes en 20 de las 23 provincias. En total hay 200 en actividad. De ellas, sólo 40 son recomendables en cuanto a su aprovechamiento real e infraestructura.
En San Juan, Pismanta, departamento Iglesia, es la única fuente termal que puede decirse cumple con los requisitos de ser un atractivo turístico. Además de su carácter terapéutico natural, aunque para muchos carece de mayores comodidades y le falta continuar desarrollándose.
Las aguas termales de La Laja, en Albardón, a muy pocos kilómetros de la ciudad de San Juan, constituyen un recurso único que no están siendo explotadas, a pesar de contar con una infraestructura básica que podría ser restaurada con esos fines. El proyecto de la construcción de un hotel en las inmediaciones abre la posibilidad de que en un futuro próximo se las pueda aprovechar en todo su potencial. Con las termas de Talacasto, en Ullum, sucede algo similar. Hay una antigua infraestructura utilizada ocasionalmente por viajeros, pero carecen de todo tipo de comodidad. Una inversión importante en este sitio podría recuperar un paraje que queda camino a los departamentos cordilleranos y que tampoco está muy lejos de la ciudad de San Juan.
Agua Hedionda, en Jáchal, es otro de los sitios termales con un gran potencial, pero que no se está explotando, a pesar de que hubo varios actores turísticos y de otras organizaciones (como los monjes tibetanos) interesados en la hostería que se encuentra en el lugar.
La Dirección Nacional de Desarrollo Turístico de la Nación, en el marco de la sexta edición de la Feria Expotermal, ofreció un informe sobre el desarrollo alcanzado por sitios con fuentes termales, destacando el avance de lugares como Termas de Río Hondo; Entre Ríos, considerada "Capital nacional de circuitos termales” y la localidad de Dolores, en la provincia de Buenos Aires, donde está el "Parque Termal de Dolores”.
Hay pruebas de que las características de las aguas termales de San Juan son excepcionales, como se ha comprobado en Pismanta o como lo corroboró la licenciada en Turismo, María Teresa Forradellas, cuando llevó una muestra de las aguas termales de Agua Hedionda a un Congreso Internacional de Aguas Termales en Cuba. Allí le dijeron que esas aguas termales eran mejor que las de muchas partes del mundo, incluyendo Italia, considerado como uno de los países de mayor relieve en este tema.
- Cuyo: Pismanta, en San Juan; Cacheuta, Challao y Los Molles, en Mendoza y San Jerónimo y Balde, en San Luís.
- Noroeste: – Reyes y Aguas Calientes, en Jujuy; Rosario de la Frontera, en Salta; Fiambalá y La Aguadita, en Catamarca; Santa Teresita, en La Rioja; Río Hondo, en Santiago del Estero y Taco Ralo, en Tucumán.
- Litoral: – Oberá, en Misiones; Sáenz Peña, en Chaco; Monte Caseros, en Corrientes; Federación, Villaguay, Concordia, Concepción del Uruguay, Villa Elisa, Colón, María Grande, Gualegauaychú, Chajarí, Victoria, San José y Basavilbaso, en Entre Ríos y Oliveros, en Santa Fe.
- Región Pampeana: – San Clemente del Tuyú, Carhué, Médanos, General Belgrano, Necochea, Pedro Luro y Villalonga, en Buenos Aires y Larroudé, en La Pampa.
- Patagonia: – Copahue, Domuyo y Epulafquen, en Neuquén y Tolhuin, en Tierra del Fuego
- Centro: – Serrezuela, en Córdoba.
Por Alfredo Correa
DIARIO DE CUYO
