Treinta dotaciones de bomberos luchan por apagar el fuego en los pastizales de Ezeiza, mientras en Bariloche permanece cortada temporalmente la mítica ruta 40 por presencia de humo y fuego en el tramo que une El Foyel con el acceso al Cerro Tronador en la provincia de Río Negro. Escenas como estas se multiplican a diario en todo el país, por eso, ayer el Gobierno declaró la emergencia ígnea en todo el país por el plazo de un año para dar respuesta a la creciente cantidad de incendios masivos en el territorio nacional que constituyen un "preocupante fenómeno" agravado por la ola de calor, la sequía y los vientos intensos.
La medida se adoptó mediante el decreto 6/2022 publicado ayer en el Boletín Oficial, donde se dispuso "la Emergencia Ígnea en todo el territorio de la República Argentina por el plazo de un año", para adoptar "las medidas que resulten necesarias para propiciar y atender con carácter inminente la presupresión y combate de incendios, la restauración de las zonas afectadas y la prevención de nuevos focos".
"El Gobierno nacional está reconociendo una situación verdaderamente compleja y adversa en materia climática que exige una respuesta muy contundente desde el Estado para disponer de todos los recursos posibles", aseguró a Télam el secretario de Control y Monitoreo Ambiental, Sergio Federovisky.
El viceministro de Ambiente sostuvo que "tener disponibilidad de recursos adicionales por la declaración de emergencia ígnea es un elemento muy potente para poder enfrentar una temporada muy compleja".
"La declaración de un estado de emergencia supone que todos los recursos disponibles tiene que ir a enfrentar esa situación", añadió.
El artículo 2 de la resolución establece la creación de un grupo de trabajo que será presidido por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, que conduce Juan Cabandié, y estará integrado por todas las partes involucradas en la adopción de medidas y acciones para atender la situación de incendios forestales. También instruye al jefe de Gabinete, Juan Manzur, "a reestructurar, modificar o reasignar partidas presupuestarias con el fin de fortalecer de inmediato la capacidad estatal de respuesta ante la emergencia".
En el último año 331.000 hectáreas fueron afectadas por incendios forestales, lo que representa una reducción de más del 70% con respecto a las 1.136.534 hectáreas del 2020, según datos del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF).
Hoy se registran focos activos en las provincias de Río Negro, San Luis, Buenos Aires y Formosa, según el reporte de incendios del organismo. "El foco que más nos preocupa es en la provincia de Río Negro en la zona del Lago Steffen (Bariloche)", indicó a Télam Federovisky sobre el incendio que comenzó el pasado 7 de diciembre y tras ser controlado volvió a reavivarse en los últimos días.
Igual, siguen atentamente la lucha contra el fuego en Ezeiza.