En el conflicto que tiene enfrentados al Gobierno provincial y a los regantes por el debate de la nueva ley de riego, el secretario del Agua, Ramiro Cascón, dio a conocer ayer que no hay intención de avanzar con la iniciativa hasta que no haya un acuerdo con los productores. "No es la idea avanzar si persiste la inquietud", sostuvo. Y aclaró que están dispuestos a aclarar los puntos que sean necesarios.

Lo que está en discusión es el proyecto de ley de Fomento de la Eficiencia y Sustentabilidad Hídrica, que está en estudio en la Cámara de Diputados.

Pero los integrantes de la Juntas de Riego se oponen porque, entre otros puntos, consideran "inoportuno" el cambio en el sistema de riego y porque sostienen que "no se respeta la igualdad entre los regantes".

Para dar a conocer la posición del sector, Omar Aciar, presidente del Junta de Riego de Jáchal, explicó frente a la delegación de Hidráulica en ese departamento que el proyecto "es perjudicial para los productores". Y que están dispuestos a ir a la Justicia con un recurso de amparo si desde el Gobierno provincial quieren avanzar.

Incluso le han presentado a la titular de Hidráulica, Guadalupe López, una nota exponiendo el malestar del sector.

Entre los puntos principales, el proyecto apunta a introducir como cambio la decisión de pasar a regar de acuerdo a la demanda o la necesidad de cada cultivo, en lugar de un coeficiente fijo, como es hasta ahora. Es lo que también se conoce como entrega diferenciada de acuerdo a la necesidad de cada cultivo. Así, por ejemplo, no existe la misma necesidad de agua de un viñedo o una chacra.