Hace unos días AMLO arremetió contra el diario "Reforma”, acusándolo falsamente de silenciar los escándalos de corrupción en los años noventa.

Francisco Martín Moreno es uno de los escritores más conocidos de México, y varias de sus novelas históricas han encabezado las listas de best-sellers. De manera que me sorprendí mucho cuando me contó que está teniendo dificultades para promocionar su nuevo libro, una novela basada en el presidente Andrés Manuel López Obrador.

La novela, titulada "Ladrón de Esperanzas”, trata sobre un presidente ficticio llamado Antonio M. Lugo Olea. Sus iniciales son las mismas que las del actual presidente de México, AMLO. Su antecesor en el libro es otro personaje ficticio llamado Ernesto Pasos Narro. Sus iniciales, EPN, son las mismas que las del reciente presidente mexicano Enrique Peña Nieto. La portada del libro muestra una imagen, tomada desde atrás, de AMLO, el verdadero.

El AMLO de la novela es un líder bien intencionado pero mesiánico y errático, que miente todo el tiempo, a veces sin estar consciente de ello. Son algunas de las cosas que sus críticos le endilgan al actual presidente mexicano.

"Esta es mi primera novela periodística escrita en tiempo real”, me dijo Martín Moreno. "Y estoy teniendo muchos problemas para difundirlo”.

"Debo haber enviado unas 60 cartas a los presentadores de radio y televisión, y sólo cuatro o cinco me respondieron”, dijo. "Cuando escribí mi libro anterior, que trata sobre la historia del henequén en Yucatán, me llenaban de invitaciones para entrevistarme”.

Cuando le pregunté si cree que AMLO está tratando de censurar su libro, Martín Moreno me dijo que "no es censura, sino autocensura. Los periodistas le tienen pánico a este hombre. El miedo está aflorando a una velocidad sorprendente”.

AMLO fue elegido con el 53% de los votos, y su popularidad se ha disparado desde entonces. Una nueva encuesta del diario "Reforma” muestra que tiene un índice de aprobación del 78 por ciento.

Durante sus primeros 100 días en el cargo, AMLO subió el salario mínimo en un 16% y aumentó las pensiones. Pero la mayoría de los economistas temen que la luna de miel de AMLO no durará mucho.

El Fondo Monetario Internacional y la mayoría de las principales instituciones financieras ya han rebajado las previsiones de crecimiento de México para este año. Al igual que el presidente Donald Trump, AMLO ataca rutinariamente a lo que llama "la prensa fifí”, y a los periodistas "neoliberales”.

Todas estas son malas señales para el futuro de México. Si hay un clima de intimidación contra los periodistas críticos en momentos en que la popularidad de AMLO es del 78 por ciento, ¿qué pasará cuando disminuya al 30 o 40 por ciento, como probablemente pasará cuando el presidente se quede sin dinero para dar aumentos salariales?

En momentos en que el presidente de México tiene poderes casi sin precedentes "incluyendo una gran mayoría en el Congreso” una prensa independiente es la mejor garantía de que el país conserve un sistema de pesos y contrapesos. Sin eso, México pronto podría tener una presidencia imperial populista.

 

Por Andrés Oppenheimer
Columnista de The Miami Herald y nuevo Herald, Miami, EEUU.