El verano 2022 registró ‘olas de calor extremas y sin precedentes’, en la Antártida ‘temperaturas más altas a lo normal’, y en el otoño e invierno las condiciones fueron más frías que lo habitual, según el reporte preliminar publicado ayer por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), en el marco de la 27° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2022 (COP27).
El informe provisional señaló que ‘en el verano 2021/2022 ocurrieron las tres primeras olas de calor de la temporada, con un evento sin precedentes que afectó a gran parte del país entre el 6 y el 26 de enero’. ‘Esta fue una de las olas de calor más extremas debido a su extensión (72% del territorio nacional)’ y duración (hasta 14 días)’, agregó.
La temperatura más alta del año se registró en la localidad salteña de Rivadavia, el 1 de enero, con 46.5 °C, mientras que Mar del Plata también registró una marca inédita de 42.4 °C en la tarde del 14 de enero. Dentro de lo intenso de la ola, también se destacó la alta frecuencia de días con más de 40 °C, que fue máxima en el norte argentino, donde se batieron récords históricos (19 días en Las Lomitas en Formosa).
Con respecto a la Antártida, el SMN indicó que la temperatura media ‘en lo que va del 2022 fue superior a lo normal en las 6 estaciones antárticas’.
Además, durante el otoño y el invierno se registraron ‘olas de frío intensas entre mayo y julio que afectaron parte del centro y el sur del país’. La temperatura más baja del año fue de -19.9 °C en Maquinchao, en Río Negro, el 19 de Julio.
Por otra parte, 2022 se ubica en el puesto 21 de los años más fríos de las últimas seis décadas en Argentina, a diferencia del resto del mundo que registra temperaturas cada vez más elevadas.
Las variaciones del clima en la Argentina tienen relación con eventos que ocurren mucho más allá de su territorio, como el Niño-Oscilación del Sur, un fenómeno natural caracterizado por la fluctuación de las temperaturas del océano en la parte central y oriental del Pacífico ecuatorial, asociada a cambios en la atmósfera. Por otro lado, el SMN relevó que los registros de gases de efecto invernadero muestran un incremento constante en el transcurso de los años. Esos gases aumentaron su concentración en 2022, si bien los valores fueron menores a las concentraciones globales.
Más seco
Con respecto a las sequías, hasta septiembre, 2022 se posiciona en el puesto 18 de los años más secos desde 1961. Este año, se reportó el segundo junio más seco desde 1961: 11 localidades del centro del país tuvieron récords de precipitación
acumulada mínima.