El 35,4 por ciento de pobreza y su impacto en la alimentación de más de 15 millones de argentinos penetró de cabo a rabo la campaña de Alberto Fernández que se obsesiona por dar respuestas a este problema crónico en Argentina. Por eso, el candidato presentó ayer su plan llamado "Argentina contra el hambre" que contempla, entre otras medidas, la creación de un Consejo Federal formado por universidades, sindicatos y organizaciones sociales, además de la promoción de canales de comercialización de alimentos y economía social.
En la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires, el candidato del Frente de Todos dijo que si bien el plan "puede ser implementado inmediatamente", prevé una serie de medidas que será necesario tomar a nivel ejecutivo para su efectiva puesta en marcha.
Igual, llamó a "empezar a materializarlo" ya mismo, sin esperar a los comicios del 27 de octubre que lo pueden consagrar como nuevo presidente.
Los ejes del plan son "mejorar la alimentación y la nutrición", "bajar el precio de los alimentos", "crear empleos", "implementar un sistema de alimentación sustentable y sostenible desde la producción hasta el consumo", entre otros. También contempla el acceso a la Canasta Básica de Alimentos, donde se propone que "Precios Cuidados" tenga estatus de ley y además promueve la puesta en marcha de una nueva lista alimentaria con productos "saludables" mediante la creación de "una gran red de círculos de productores locales y consumidores para comprar a precios baratos frutas, verduras, lácteos y carnes". Asimismo, prevé la creación de un Consejo Federal "Argentina contra el Hambre", que se propone como un "espacio institucional de articulación entre el Estado nacional, junto a los estados provinciales y municipales", formado por "universidades, sindicatos, cámaras empresariales, iglesias, organizaciones sociales y actores locales". Por otra parte, plantea la devolución del IVA (Impuesto al Valor Agregado) a familias en situación de vulnerabilidad y reducir los precios de los productos saludables junto con la sanción de una ley de Góndolas "para garantizar variedad de marcas en los productos alimenticios y mayor competencia".
Fernández señaló que será pilar importante de este plan "conformar una figura colectiva de cooperativa de la agricultura familiar, con un régimen especial impositivo, para promover la comercialización conjunta y a escala". También prevé la creación de un Programa Nacional de Seguridad Alimentaria que incluye "alimentos frescos como frutas, verduras, carnes y lácteos en las políticas públicas de alimentación y nutrición compradas por parte del Estado a los sectores de la economía social y popular".
Para financiar el plan, se propondrá un "Fondo Federal de Alimentación y Nutrición sobre la base de un porcentaje del presupuesto nacional", la compra por parte del Estado a los "productores de la economía social y popular, de la agricultura familiar y campesina y a micro y pequeñas empresas".
Fernández presentó el plan durante un acto en el que cuestionó que Argentina sea "un país que produce alimentos para 400 millones de personas y no pueda alimentar a 15 millones de argentinos que están en situación de pobreza". El candidato del FDT pidió "olvidar las diferencias" para "combatir el hambre en Argentina". "No me importa de dónde vienen ni lo que piensen: esta es la batalla más sensata que podemos hacer, que todos los argentinos dejen de padecer hambre. Moralmente nos va a hacer una gran sociedad", puntualizó. "Lo primero que vamos a reperfilar son los precios de la canasta básica argentina (…) para que todos tengan acceso a esa canasta básica", aseveró.
Guiño a Uruguay
Alberto Fernández afirmó ayer que la integración entre Uruguay y Argentina "es indisoluble" y sostuvo que aquí "deberían copiarse los 15 años de desarrollo que hizo el Frente Amplio" en el vecino país.
Fernández recibió ayer al candidato presidencial del Frente Amplio de Uruguay, Daniel Martínez.