Con la apertura de sobres de la licitación, el Ejecutivo comenzó a transitar el camino final para la construcción del nuevo Servicio Penitenciario. Según indicó Jorge Deiana, secretario de Obras Públicas, dentro de tres meses se conocerá qué consorcio de empresas de los cinco que presentaron ofertas llevará adelante los trabajos en la localidad de Matagusanos, en Ullum. Por otro lado, destacó que la obra comenzará a ejecutarse durante el último trimestre de este año. De ser así, el nuevo Servicio Penitenciario, que contendrá a 1.220 internos, estará listo en 2021.
Una nueva cárcel para San Juan es una necesidad que viene arrastrando la provincia desde hace años. Por eso, la gestión uñaquista tomó la decisión de encarar los trabajos con fondos propios y para que, con la obra, se logre descomprimir el Servicio Penitenciario de Chimbas. El centro de detención actual tiene una capacidad para 700 internos, pero contiene a más del doble, 1.480.
La obra del nuevo Penal tiene un presupuesto de poco más de 1.658 millones de pesos, pero fuentes empresariales indicaron que las ofertas presentadas por las firmas interesadas superarán ese valor, dado la devaluación que ha tenido el peso y la inflación. Las propuestas económicas se conocerán en dos meses, una vez que la comisión evaluadora finalice con el análisis de los documentos presentados por las firmas constructoras.
En total se presentaron 17 compañías que conformaron cinco Uniones Transitorias de Empresas (UTE). El primer grupo fue el de Galvarini, Diamante Giuliani y Sigma; el segundo de Cicón, Daz, Chiconi y Constructora Sat; el tercero entre Senda, Bilbao Construcciones, Scop y Construcciones Andina; el cuarto lo integraron Mapal, Julio Nacusi Construcciones, Suyai Srl; mientras que el quinto fue de Perfil, Laugero Construcciones y Alfa Codelo.
La primera etapa de la cárcel, de unos 43 mil metros cuadrados, estará conformada por una unidad cerrada con capacidad para 326 personas, más otro abierta para contener a 284 internos. Además habrá edificios como una escuela, una zona de residencia para el personal y un centro de salud.
Por otro lado, mientras tanto, el Gobierno no descuidará el Penal de Chimbas. De hecho está llevando tareas de ampliación, con la construcción de más pabellones y dependencias. Pero la cárcel necesita más infraestructura como un pabellón exclusivo para mujeres, un Salón de Usos Múltiples, una escuela y una cocina nueva. Si bien ya hay algunas obras en marcha, el ministro de Gobierno, Emilio Baistrocchi, destacó que los plazos para llevar adelante las licitaciones de dichos trabajos son extensos. Por eso, adelantó que enviarán el lunes a la Cámara de Diputados un proyecto de ley para declarar la Emergencia en Materia de Infraestructura y Tecnológica para el Servicio Penitenciario como en la Policía. La norma permitirá reducir los plazos de adjudicación, gracias a las contrataciones directas con cotejo de precios o licitaciones abreviadas, en la que se convoque a pocos oferentes.
Espacio
43 Mil metros cuadrados tendrá la primera etapa del nuevo Servicio Penitenciario. Se trata del mismo espacio que tendrá la Ciudad Judicial o la mitad del Centro Cívico.