Si todo marcha como está previsto, en un mes estará a disposición el Manual de Buenas Prácticas Mineras, una guía para la prevención de riesgos de trabajo, protección y promoción de la salud destinada a los trabajadores mineros.
Así lo confirmó Sonia Delgado, flamante funcionaria de la Dirección de Desarrollo Sustentable del Ministerio de Minería local, quien precisó que el desarrollo está bastante avanzado y por esta razón quince días atrás estuvieron en la provincia representantes de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo (SRT) de la Nación quienes realizaron una visita a mina Casposo.
“Fue una gran experiencia porque la posibilidad de conocer una mina in situ permite un contraste de la teoría con la realidad y en breve queremos reiterar lo mismo con una visita a Gualcamayo para que puedan conocer el trabajo de una mina a cielo abierto y una subterránea” precisó la funcionaria, quien además destacó la publicación estará destinada a todas las ramas de la industria minera local.
La formulación de un manual de buenas prácticas resultará útil a la actividad minera en un doble sentido: A los empleadores les permitirá promover acciones y ambientes saludables con la consecuente reducción de riesgos; un beneficio para los trabajadores que se verá traducido en la reducción de costos por accidentabilidad e impacta en los niveles de ausentismo y de productividad. Para su elaboración se conformó una comisión de trabajo integrada por representantes del Ministerio de Minería provincial, gremios de la industria, responsables de las áreas de higiene y seguridad de las empresas y ART.
Según Delgado “falta un par de reuniones más y sale el manual”, lo que posicionará a la provincia como la primera en el país de contar con uno de estas características pues no existen antecedentes similares en la industria. Esto significará la disposición de una resolución a partir de la cual el manual podrá ser implementado.
Actualmente se está en una instancia de articulado, faltan unos ocho según la fuente, en conjunto con las visitas a yacimientos y canteras para el contraste permanente con la realidad. “Tratamos de entrar en contacto con los trabajadores que son los que tienen la experiencia, de estas charlas por ejemplo ha surgido la necesidad de un contacto más estrecho entre los gremios y la SRT, o intensificar la realización de simulacros en los refugios”, contó Delgado.
Además, también está prevista la confección de un relevamiento de los riesgos, cargas y exigencias específicas del sector, guías de observación de problemas, check list y mediciones instrumentales; así como un mapa de riesgos con encuentros anuales y regionales de actualización.
Con el eje puesto en la higiene y seguridad, el manual buscar ser una referencia para efectuar correcciones saludables en los procesos de trabajo de la industria a la vez de constituir la base de acciones para el cumplimiento de normas y prácticas de protección de los trabajadores. Un sustento más que válido para una actividad que es Política de Estado, porque la intención también es sentar lineamientos para la elaboración de políticas preventivas a partir de las buenas prácticas que surjan de la interacción entre organismos estatales, empresas y por supuesto, la experiencia de los trabajadores mineros, los verdaderos beneficiarios. La publicación estará disponible en formato digital tanto en la web del Ministerio de Minería como en el de la SRT.
Consonancia
La iniciativa sanjuanina está en consonancia con las acciones promovidas oportunamente desde la Nación que impulsó la adhesión a un nuevo protocolo de Buenas Prácticas Públicas en el sector minero, a fin de homogeneizar condiciones para el desarrollo sustentable de los recursos en el continente. Si bien la propuesta nacional es a un nivel más macro, es clara la necesidad de dejar sentado mediante protocolos o reglamentos, sobre los modos de hacer minería. Tal como adelantó CUYO MINERO en abril pasado y según Juan Biset, por entonces subsecretario de Política Minera, el régimen de cierre de minas y de gestión de residuos mineros fueron los principales lineamientos de trabajo considerados. Dados los últimos cambios en la cartera minera nacional, habrá que esperar ahora la continuidad de esta propuesta.