Viejos tiempos. Hugo Ramírez (a la izquierda) fue presidente del PRO y se fue distanciado de Cáceres. Ahora, Fernando Patinella (a la derecha) busca una renovación de la actual conducción del partido.

 

El descontento con la actual conducción del PRO local venía sonando de manera subterránea y el cuestionamiento se hizo visible a través de uno de sus dirigentes. El apoderado del partido, Fernando Patinella, aseguró que en las elecciones de febrero no acompañará al grupo de Eduardo Cáceres, presidente del macrismo, si este planea seguir en el poder, dado que "aspiro a que haya una renovación en el ámbito de autoridades y en el manejo de estrategias políticas". Además, resaltó que está trabajando con otros afiliados en una alternativa para dar pelea por quedarse con el mando de la fuerza.

Patinella es el apoderado del PRO desde 2007 y en 2015 asumió como delegado local del Ministerio de Trabajo de la Nación. El abogado blanqueó las críticas hacia Cáceres al señalar que no ha venido potenciado al partido para que sea una verdadera fuerza opositora y que no ha habido una apertura para el crecimiento de dirigentes. En las últimas elecciones, destacó que quedaron "diluidos bajo las manos de Producción y Trabajo". Ante estas críticas, este medio se comunicó con Cáceres, pero prefirió no hablar del tema.

Para los sectores internos del PRO en las provincias se abrió una puerta para competir, ya que en medios nacionales trascendió que la conducción central (que estará a cargo de Patricia Bullrich) habilitará el juego puertas adentro. En ese marco, Patinella resaltó que "hemos tenido contacto con dirigentes nacionales y le planteamos la voluntad de participar en un ámbito de total y absoluta lealtad partidaria". La referencia a la "lealtad" no fue casual, sino que fue un claro dardo, debido a que ha circulado en portales nacionales que el líder del PRO sanjuanino estaría analizando integrar un grupo peronista del PRO en la Cámara de Diputados de la Nación. Sin embargo, el propio Cáceres lo desmintió a través de redes sociales (ver aparte).

Patinella señaló que el sector opositor que se está gestando contendrá a los afiliados que se encuentran disconformes y que constituirán una alternativa. No obstante, ya hubo intentos de armar internas contra Cáceres y todos quedaron en la nada. Así, el desafío del espacio será convertirse en una verdadera opción que le dé pelea al grupo de Cáceres (que ya cuenta con una estructura armada) y que pueda postular candidatos en, al menos, 14 departamentos. Si bien fuentes partidarias reconocen que es difícil que surja una figura que pueda darle pelea a Cáceres, Patinella explicó que "existe un grupo importante, al que día a día se van sumando simpatizantes", aunque aún prefirió no dar nombres. Con respecto a encabezar a este espacio, el apoderado dijo que "es una decisión que se va a tomar a nivel grupo, si no estaríamos cayendo en los mismos vicios de la conducción actual". No obstante, no descartó ser el candidato si todo surge del consenso.

En su corta vida, el PRO a nivel provincial sufrió fracturas y el alejamiento de dirigentes. El último de los más resonantes fue el de Martín Turcumán (ver aparte). El nuevo descontento ya venía sonando hace algunas semanas. Todos los cuestionamientos se dan en el marco de la pérdida de poder que experimentará el macrismo en la provincia, en donde no es gobierno ni administra ninguno de los 19 municipios. En 2015, por el triunfo de Macri, había conseguido más de 20 cargos en organismos nacionales con asiento en San Juan. Desde el 10 de diciembre, al partido sólo le quedarán algunos lugares de peso, como una banca nacional y otra provincial.

 

En sociedad

El Pro local obtuvo su primer cargo de peso en 2013, cuando Eduardo Cáceres consiguió su banca como diputado nacional de la mano del frente que por entonces conducía Roberto Basualdo, de Producción y Trabajo. A tono con lo nacional, el macrismo sanjuanino se alió en 2015 con el radicalismo, pero el basualdismo decidió apoyar a Sergio Massa. Tras los pases de factura y el acercamiento a Macri, Producción y Trabajo y el Pro volvieron a aliarse en 2017 y Cáceres retuvo su cargo.

 

>> MÁS DETALLES

 

Diferencias

El diputado nacional Eduardo Cáceres aclaró a través de Twitter que no se alineará al kirchnerismo. "Soy el presidente del Pro San Juan (tercer mandato) y ferviente defensor de Mauricio Macri de hace diez años" escribió en la red social. Cáceres no especificó qué versión circuló, pero desde un portal nacional trascendió que el sanjuanino sería uno de los legisladores que jugaría en un sector del macrismo ligado al peronismo que planea apoyar al presidente Alberto Fernández en los primeros meses de su mandato.

Pujas

El PRO en San Juan nació en 2006 y su corta vida estuvo signada por pujas de poder. En 2011, la estructura macrista expulsó al dirigente Wbaldino Acosta Zapata. Ese año estuvo al frente de la conducción Hugo Ramírez, quien luego fue desplazado por la Asamblea de Delegados. Frente a esa embestida, el partido a nivel nacional decidió la intervención. Ramírez fue diputado y se alejó por las diferencias con Cáceres. Otro que se peleó con el legislador nacional fue Martín Turcumán, quien había sido el candidato a gobernador en 2015.