El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, afirmó ayer que EEUU tiene "una política de asfixia económica para provocar estallidos sociales en el país", tras las protestas contra el Gobierno que se registraron el domingo en varios sectores de la isla, tras lo cual su par norteamericano, Joe Biden, le pidió "al régimen" isleño" que "escuche a su pueblo".
Miles de cubanos tomaron las calles el domingo para protestar contra el Gobierno al grito de "¡libertad!" en una jornada inédita que se saldó con cientos de detenidos y enfrentamientos después de que Díaz-Canel conminara a sus partidarios a salir a enfrentar a los manifestantes.
Las protestas, las más fuertes que han ocurrido en Cuba desde el llamado "maleconazo" de agosto de 1994, se producen con el país sumido en una grave crisis económica y sanitaria, con la pandemia fuera de control y una fuerte escasez de alimentos, medicinas, además de largos cortes de electricidad. Unas imágenes de cientos de personas marchando en medio de gritos de "abajo la dictadura" por las calles del pueblo de San Antonio de los Baños, prendieron la mecha en las redes sociales y dieron inicio a llamamientos a protestar.