Las entidades vitivinícolas salieron ayer con los tapones de punta ante la reapertura del ‘dólar soja’, desilusionados y molestos porque nunca se puso en marcha el tipo de cambio preferencial para economías regionales anunciado a principios de noviembre, para paliar los daños por las heladas tardías. Para colmo, ahora hay versiones de que el dólar región no verá la luz, y que el Ministerio de Economía, Producción y Agricultura, que conduce Sergio Massa, estudia reemplazarlo por la eliminación de retenciones por 90 días, un cambio que no convence a la mayoría.
Las quejas empezaron a multiplicarse cuando la mendocina Gabriela Lizana, directora del BICE Fideicomisos y representante del equipo de Sergio Massa en Mendoza, informó que "para los primeros meses de 2023 se bajarán retenciones a los productos de Economías Regionales", y que finalmente el dólar para las economías regionales, que prometió el propio Massa en su visita a la vecina provincia hace menos de un mes, finalmente no se implementará.
Patricia Ortiz, presidenta de Bodegas de Argentina, advirtió que ‘la industria se encuentra tan mal en este momento por múltiples causas’ y mencionó el tipo de cambio atrasado, el aumento de insumos por encima de la inflación, retenciones, aranceles por falta de tratados de libre comercio, imposibilidad de importar y pagar gastos afuera para la promoción y heladas, entre otros. ‘Cualquier medida es bienvenida… pero no alcanza. ¡Entendemos el difícil momento, pero pedimos se tengan en cuenta estos sectores que generan empleo y exportan!’, reclamó la empresaria de la cámara que reúne a la mayoría de las principales bodegas de todo el país. Fernando Morales, desde la Cámara de Exportadores de Mosto, analizó que lo ideal es la quita permanente de los derechos a la exportación, pero que si estos son sólo por 90 días, ‘por supuesto es mejor contar con un tipo de cambio especial aunque sólo provea mejoras de corto plazo’.
En la Mesa Vitícola directamente sacaron la cuenta del porqué una medida no compensa la otra ‘ni por cerca’: ‘Exportar hoy con un tipo de cambio oficial a 160 o 170 pesos, frente a un dólar diferencial de 230 como el que le han dado a la soja, es una diferencia del 35%. Sacar las retenciones es apenas un 4,5%’, calculó su vocero, Pablo Martín. El productor dijo que ‘lo que desalienta mucho más es el incumplimiento de las promesas, lo anunciaron con bombos y platillos, nos hicieron ir a Mendoza a todas las cámaras y aún no ha salido nada para los afectados por las heladas y si para la soja. Nos sentimos discriminados, el beneficio se lo lleva otro sector y no se fijan en las economías regionales que lo necesitan’, se quejó Martín. Añadió que la entidad pidió una reunión con el gobernador Uñac ‘porque no hay reacción ni del Estado nacional ni del provincial’.
La Confederación Pyme que reúne a entidades de economías regionales viene pidiendo hace tiempo un dólar diferencial como el de la soja, y ayer su representante por San Juan, Juan José Ramos disparó: ”Estamos más que molestos, creemos que habían entendido la situación nuestra, la soja tiene una situación económica mejor que nosotros”, indicó. Añadió que si es por el impacto fiscal, las economías regionales también ingresan los dólares y tienen un impacto mayor en número de productores y trabajadores”. Ramos dijo que es muy superior la diferencia de contar con un dólar especial en vez de bajar temporalmente retenciones. ”Además la pasa y la uva de mesa, tienen retenciones cero”, reclamó y dijo que los exportadores de uva de mesa cuya cosecha empieza en dos semanas se habían ilusionado en exportar con un dólar diferencial. Sin él, vaticinó que es difícil que el productor pueda recibir más plata por la uva.
En la Cámara de Comercio Exterior también analizaron que el atraso del tipo de cambio es tan grande, que no hay medida relativa que lo pueda atemperar. Su presidente Antonio Giménez dijo que las retenciones ”no deben existir para ningún producto, pero en especial para las mal denominadas economías regionales, además de que una baja de retenciones por 90 días es una medida tan parcial como injusta”. Visiblemente molesto, Giménez añadió que ”el ministro Massa dijo que los que piden sinceramiento del tipo de cambio pierden valor en sus empresas. ¿A cuál se refiere, a la cantidad que han cerrado o dejado de exportar? ¿porque a $160 el dólar que cobran respecto del valor real del dólar acaso pueden sostener en actividad sus empresas?’, se preguntó.
Eduardo Garcés, desde la Federación Viñatera, dijo que la uva en fresco y la pasa no tienen retenciones, y al igual que otros dirigentes, indicó que retenciones a un 4% o 5% frente a un dólar de $160 que pase a $230 ”es mucho más”.
- Estudio prioriza la uva sobre la soja
Un documento elaborado hace un año por el Observatorio Vitivinícola Argentino revela que una hectárea de viñedos genera más dólares por exportaciones, y más empleo que la soja. El informe señala que una hectárea de uva genera 5,6 veces más dólares que una de soja, a la vez que 100 hectáreas cultivadas les dan empleo a 72 personas frente a sólo 2 que trabajan con la oleaginosa.
Dentro de las cadenas agroalimentarias que más exportan en la Argentina, el complejo uva es el que más destaca y el que ofrece el efecto multiplicador más significativo. El complejo vitivinícola genera 4.800 dólares por hectárea, valor que se posiciona bastante por encima del resto de los complejos exportadores. Por ejemplo, la soja genera 857 dólares por cada hectárea. Además la vitivinicultura atiende un importante mercado interno en el cual también se generan ingresos para la economía local.
- ¿Anuncios fallidos?
El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció el 7 de noviembre un dólar preferencial destinado a promover las exportaciones de economías regionales, además de subsidios y créditos para la vitivinicultura y la fruticultura, afectadas por heladas tardías.