Ricardo Donoso se sorprendió cuando los delincuentes patearon la puerta de su habitación. Huyeron, pero antes habían logrado robarle varias cosas.

 

"Estaba acostado y cuando sentí como empujaban la puerta le dije a mi señora que se nos habían metido a robar, en eso reventaron la puerta de una patada y los vi a los dos parados y les dije "que hacen hijos de p… y entonces se escaparon", contó ayer Ricardo Donoso (51) sobre un dramático episodio ocurrido a las 3,30 del último miércoles en una casa del predio de la ripiera "Mercado" de calle Mendoza, al norte de Centenario, Chimbas, donde vive con su familia. Según Donoso, los sujetos buscaban más cosas de valor en su habitación, pues cuando huyeron ya no estaban en la vivienda una garrafa de 15 kilos, un equipo musical y dos teléfonos celulares.

Donoso es empleado en esa ripiera y aseguró que, previo a toparse con los delincuentes, había escuchado ladrar a sus perros, sin imaginar que le estaban advirtiendo de la presencia de los intrusos.

Los delincuentes, también se confiaron tras observar que nadie salió de la casa a pesar de la advertencia de los perros. No descartan que hubieran escapado en algún vehículo.