Desfile. De la Sota, que llegó a desfilar para un evento solidario, era un amante de sus mascotas.

 

El cordobés De la Sota era un amante del tango y cuando fue embajador de Argentina en Brasil, afirman, difundió este género musical en ese país.

En 2015, a 8 días de entregar el mando del Poder Ejecutivo de su provincia, lanzó un CD con seis canciones interpretadas por él, entre las cuales se destacan varios boleros y cuartetos.

Sin embargo, ese dirigente que abogaba por un peronismo conciliador y que conocía tanto el juego electoral, también supo ser un aficionado del tenis, amante de sus mascotas e incluso, en el último tiempo, se animó a incursionar en el negocio de la moda.

"Los pelos que me puse en la cabeza hacen que no tenga pelos en la lengua", dijo el exgobernador en uno de sus últimos reportajes, tomándose con humor los comentarios sobre su cabellera.

El año pasado, el cordobés había tomado la decisión de no competir en las elecciones legislativas y, a su vez, había anunciado que iría por la presidencia en 2019. En ese año, De la Sota se alejó de la política y decidió zambullirse en el negocio de la moda.

Así es como inauguró "El Hombre", su local de ropa masculina en la localidad cordobesa de Río Cuarto, y hasta desfiló para un evento solidario.

Nacido el 28 de noviembre de 1949, José Manuel De la Sota fue un político justicialista que cursó sus estudios en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Córdoba, donde se recibió de abogado.

Fue electo gobernador de la provincia de Córdoba desde el 12 julio de 1999 hasta el 12 de julio de 2003. Asimismo, el 27 de abril de 2003, en las elecciones para gobernador resultó reelecto, reasumiendo así el 12 de julio de 2003 su segundo mandato hasta diciembre de 2007.

El 7 de agosto de 2011 resulta electo nuevamente como gobernador de la provincia y el 10 de diciembre de ese mismo año asume su tercer mandato.

Si bien en la actualidad no ocupaba ningún cargo, en el último tiempo José Manuel De la Sota había comenzado a dar signos de no haber abandonado su deseo de llegar al sillón de Rivadavia.

En la última elección presidencial fue tras su gran objetivo, para lo que siempre se preparó: ser Presidente de la Nación.

Pero esa no fue la primera vez que el exgobernador cordobés José Manuel De la Sota intentara alcanzar un lugar en la Casa Rosada: en 2002, luego de anunciar que no iría por otro mandato, el entonces presidente de la nación Eduardo Duhalde le dio su bendición y "El Gallego" (así lo llamaban) comenzó a recorrer el país con una candidatura presidencial que no logró cosechar adhesiones.

 

Camionero, imputado

Como ocurre habitualmente con tragedias viales, y bajo una figura de sospecha leve, el conductor del camión contra el que chocó De la Sota fue imputado por homicidio culposo.

Se trata de un hombre de 35 años que manejaba el camión y que fue embestido por la camioneta que manejaba De la Sota, circunstancia que le costó la vida. Por las consecuencias del accidente, el conductor se encontraba internado, pero estable. La imputación es una formalidad del proceso. Todo indica, hasta ahora, que la camioneta Volvo lo alcanzó y lo impactó por detrás, sobre el costado derecho, aparentemente en el marco de una maniobra con la que De la Sota intentó, a último momento, esquivarlo.

 

La presencia de su madre

Adelia María Moriconi, madre del dirigente fallecido José Manuel De la Sota, asistió en la tarde de ayer a despedirse de su hijo al Centro Cívico.

La mujer, de 98 años, no supo de la muerte de su hijo hasta la madrugada de ayer, cuando las hijas del exmandatario cordobés, junto a dos médicos, le comunicaron la noticia y le consultaron si quería asistir a la ceremonia íntima con los familiares, que tuvo lugar antes del velatorio público, pero Adelia no asistió.

Luego, a las 15.30 del domingo, se hizo presente en el Centro Cívico del Bicentenario, donde dirigentes políticos, amigos, conocidos y público en general se acercó desde la mañana a despedir los restos de De la Sota.