En junio de 2016, el cuerpo de Talía Recabarren apareció  sobre ruta 12, a la altura del kilómetro 26, en Zonda, luego de permanecer varios días desaparecida. La joven murió asfixiada, luego de que alguien le tapara la boca y la nariz. Ángel Morales, exnovio de la chica, confesó la autoría del crimen. Sin embargo, en la familia Recabarren están seguros de que no actuó solo y señalan a Débora Zámora, en ese momento, pareja del detenido.

 

En las últimas horas, el caso se tornó aún más tenebroso, luego de que desconocidos realizaran pintadas con escalofriantes amenazas de muerte sobre la tumba de Talía, dirigidas a su hermana Mayra.

 

 

 

"Estamos atemorizados. Acá hay más implicados aunque él – por Morales – se culpe solo. Que no haya respuestas es muy doloroso. La policía no hace nada, esta es la tercera denuncia que hago. Están a favor de esa gente. Ya me mataron a la Talia, que no le hizo nunca a nadie. Yo no parí hijos para que me los anden matando. Me tratan como una loca, me reciben las denuncian y las archivan. Estoy desesperada", dijo Anabella, madre de las jóvenes.