En su taller. Hugo Vinzio en su hábitat junto a las figuras que trabajó para la exposición. (créditos foto Daniel Arias)

¡¡¡Tachín!!! ¡¡¡Tachín!!! Evocando una vieja anécdota que data de hace 35 años y tuvo como protagonista a un director de orquesta que llegó a tocar con la Sinfónica, Hugo Vinzio rescató este dicho popular para titular la nueva exposición que estrenará esta noche en el Auditorio Juan Victoria (ver aparte). A sus 63 años, el artista plástico exhibirá una serie de 15 piezas para celebrar el Día Internacional de la Música, en honor a Santa Cecilia, su patrona.

Su última experiencia con la escultura fue en 2015 con Cabalgante, su versión de El Quijote de la Mancha a 400 años de la publicación de la segunda parte de la novela de Miguel de Cervantes Saavedra en 1615. Pero esta vez, Vinzio se enfocó en la arcilla con figuras trabajadas entre 2018 y 2019, que aluden a los distintos rubros musicales.

Luego de presentar la colección de dibujos Sin remilgos en abril pasado, el artista se abocó a cocinar una serie de rostros en materiales y técnicas diversas, incluyendo arcillas industriales y locales, madera nativa y metales, buscando dar un "pasito más" en su carrera, con "musas de testigo", como dijo, "intentado otras experiencias", rompiendo con lo que venía haciendo e incorporando nuevos modos expresivos en su obra, moldeando herramientas como el retamo.

 

 

Algunos rostros. En el recorrido podrán verse caras conocidas como Paco de Lucía, Pavarotti y un coro de voces.  (créditos fotos Marcos Urisa)
 

"El tema me sigue de siempre, desde que tengo uso de razón me acompañan. En su fuero íntimo, cada uno tiene algún modo musical que lo identifica, así es que he tratado de hacer una representación de géneros como lo popular, lo clásico, lo melódico, el canto coral, el tango, el jazz o la música andina, en algunos casos con personajes específicos y en otros por músicos de mi imaginación", expresó el creador. Es por esto que grandes celebridades del género estarán reunidas en un mismo espacio, con líneas que destruyen toda simetría y el tono humorístico que caracteriza a la producción del autor.

De esta manera, el tango dirá presente en el rostro de un engominado Edmundo Rivero junto a un viejo micrófono; el rock and roll en la talla del extraordinario Jimi Héndrix, que impactó a Vinzio luego de ver su legendaria presentación en el festival de Woodstock el 18 de agosto de 1969; en lo clásico a un Beethoven que conoció a través de su padre siendo muy niño y fue descubriendo a medida que indagaba en su vida, "en temas como su sordera y la composición de su inolvidable 9na Sinfonía"; o el guitarrista español Paco de Lucía, "el que no sabía leer música y tocó con los más grandes en su recorrido por el embriagador ritmo gitano", como define; así como otros ídolos suyos que van desde Mozart hasta Luciano Pavarotti, Atahualpa Yupanqui y Mercedes Sosa. 

"Al principio, lo pensé como una suerte de catálogo, lo que me resultó imposible porque la música es inacabable, entonces aborté la idea y opté por centrarme en los músicos que me impregnaron. Sin querer, vi que al final, estaban representados casi todos los géneros", subrayó el creador que a sus 18 años tomó la decisión de ahondar en el mundo de la escultura, el dibujo y la pintura, tras coquetear con la música y la poesía, el cine y la escenografía teatral (fue escenógrafo durante mucho tiempo de Juan Carlos Abraham en ballet); y transitando por carreras universitarias como la Arquitectura, las Artes y las Ciencias de la Comunicación para ampliar sus conocimientos.

"Ningún personaje está al azar. Todos tiene que ver con mi vida, están en lo más entrañable de mi ser. Son esos trabajos que se van cocinando a lo largo de la vida y que un día deciden plasmarse", recalcó el escultor como el eje central de este nuevo desafío que concretó.

DATO

  • La muestra se inaugura hoy a las 20.30 en el foyer sur del Auditorio Juan Victoria y se podrá visitar hasta el 9 de diciembre, de lunes a viernes de 9 a 20.30, sábados de 9 a 20 y domingos de 10 a 13 y de 16 a 20. Entrada gratis.