El coletazo final de "El tiempo otra vez avanza" se hará sentir el próximo sábado en San Juan, último destino de la última etapa de la gira, adonde No te va a gustar volverá en uno o dos años para presentar de lleno el nuevo material "Suenan las alarmas", que el 2 de junio estará en las bateas. Sin embargo, con ganas ya de dar vuelta la página, la convocante banda uruguaya que encara la transición mechando lo que se va con lo que se viene, hará sentir en la provincia algunas de las novedades, como Prendido fuego, que ya empezó a sonar.  

"Seguramente habrá algún adelanto, alguna canción más porque ya estamos ansiosos… con el material terminado es como que ya tenemos ganas de empezar a tocarlo y creo que la gente también quiere que renovemos un poco el espectáculo, así que va a estar bueno porque vamos a mostrarlo", comentó Emiliano Brancciari, el líder del combo, en charla con DIARIO DE CUYO. 

 

 
 – ¿Siempre hay una cuota de ansiedad en la transición de un disco a otro?  

– Siempre tenemos ganas, siempre lo nuevo motiva muchísimo más allá de que es más fácil seguir con lo anterior, porque la gente ya conoce las canciones, pero esa energía nueva, esas canciones nuevas nos dan muchas ganas de renovarnos, eso es único, así que de a poco vamos mechando los dos discos. 

 – ¿Cómo se mide la vida útil de un disco? ¿Es una necesidad interna o lo ven en la respuesta de la gente?  

– Es una necesidad interna porque ya vas acumulando una cantidad de canciones que hacen que queramos grabarlas,  por un lado. Y por otro, cada dos años o dos años y medio, damos toda la vuelta a las ciudades a las que generalmente vamos con ese disco, entonces cuando ya volvemos, es con material nuevo. 

 – ¿Y el mercado les va imponiendo una suerte de "timing"?  

– No, la banda maneja sus tiempos y tiene como ese ciclo vital que vamos respetando. A veces se alarga un poquito más, porque agregamos alguna ciudad para visitar, cada vez vamos a más lugares; pero son los tiempos que manejamos nosotros. Lo definimos nosotros. 

 – Hablando de Suenan las alarmas, lo que se viene, ¿qué tenían ganas de contar y cantar ahora?  

– En realidad no me acuerdo qué contábamos antes, estoy muy metido con esto y sí, hay cambios, obviamente. Vemos que está todo como al rojo vivo, desde lo político, social, climático, personal… hay un poco de todo eso, como que todo está por explotar, al borde del colapso… 

 – ¿Se puede decir que es un disco más comprometido, con la actualidad al menos?  

– No, creo que todos los discos nuestros tienen en parte eso, quizás es un poco más crudo en cuanto a la forma de contar… 

 – ¿Considerás que las bandas tienen que tener ese anclaje, que no alcanza sólo con entretener?  

– No, no creo eso, me parece muy bien los que lo hacen y los que no lo hacen. Para nosotros depende de las ganas, de los momentos nuestros, como todo el mundo, ¿no? Está bien comprometerse y por ahí también está bien abstraerse un poco… 

 – Hablabas de un "rojo vivo", incluso en lo político. ¿Algo en particular?  

– Me parece que es algo a lo que nos acostumbramos, a nivel mundial, es la forma que tenemos de vivir… siempre estás preocupado por lo que está ocurriendo, siempre tratando de sobrellevarlo y sobrevivir… 

 – ¿"Suenan las alarmas" puede ser una alarma que ayude a encender conciencias, desde la música, para que haya un cambio?  

– La verdad que no sé si es tan así, creo que todos los cambios requieren de algo mucho más profundo que la música, pero bueno, nosotros desde donde nos toca, intentamos hacer visible lo que pensamos. 

 – ¿Hoy cómo se ve NTVG en el mapa del rock argentino?  

– Nosotros nos vemos bien, cómodos, tenemos el cariño de la gente de Argentina desde hace mucho tiempo, hicimos un camino desde cero, pasando por todo el under y con todo tipo de esfuerzo que después dio sus frutos, hicimos el camino que hace cualquier banda argentina para llegar adonde llegó. 

 – No hubo fronteras….  

– No, no, cero, al menos para nosotros no. 

 -¿Se puede hablar de una identidad del rock latinoamericano?  

– Sí, creo que sí, y me parece que está renaciendo la movida del rock latino, que había estado un poquito estancada después del gran éxito de los ’90; de a poco van surgiendo nuevos festivales y cosas que van haciendo que vuelva a sonar fuerte.  

 – ¿Y cuál es su aspiración inmediata, a nivel Latinoamérica?  

– Seguir tocando y tocar cada vez para más gente, que es lo que está ocurriendo; y cada vez nos sentimos más cómodos tocando en cualquiera de estos países, nos sentimos muy queridos la verdad… 

 

 El dato 
NTVG tocará el sábado próximo a las 22 en Sala del Sol (Luna Morena, Av. Rawson 1358 S) Anticipadas a $400 en Nevada, John Foos y Andreolo.