Hace tan solo una semana, San Juan fue testigo de un evento conmovedor que marcó un hito en el espíritu solidario de la comunidad. La Primera Caravana Solidaria de American Cars superó todas las expectativas y dejó huellas imborrables de alegría en los corazones de los niños de Lagunas de Huanacache.

 

Desde el momento en que la caravana se puso en marcha, quedó claro que este sería un día especial. Los niños, con sus rostros iluminados por la emoción, nos esperaban ansiosos. La anticipación en el aire era palpable y, cuando llegamos, sus sonrisas nos dieron la bienvenida de la manera más cálida y conmovedora. Fue un recordatorio poderoso de cuán grande puede ser el impacto de un gesto solidario.

 

En este momento de reflexión y gratitud, queremos expresar nuestro más profundo agradecimiento a todas las personas y organizaciones que hicieron posible este maravilloso evento:

 

A nuestros clientes y a todos los que se acercaron al concesionario de American Cars con juguetes, alimentos y bidones de agua en mano. Su generosidad y apoyo incondicional fueron fundamentales para el éxito de esta caravana.

 

A Oscar Sánchez y la Agrupación Amigos de Brochero, quienes desempeñaron un papel crucial en la organización y coordinación de esta iniciativa solidaria.

 

Al Colegio San Pablo, cuyo compromiso y colaboración fueron fundamentales para hacer que este sueño se hiciera realidad.

 

A la Fundación Ellos También Nos Pertenecen y a Víctor Hugo Pannis, cuyas contribuciones significativas marcaron la diferencia en la vida de estos niños.

 

A ARLET y Mac, por su apoyo continuo y por ser parte de este hermoso gesto de amor.

 

Al personal de GENDARMERÍA, que no solo nos brindó su ayuda con tachos, quemadores y gas, sino que también estuvo presente para garantizar que todo se desarrollara de manera segura y eficiente.

 

A Beatriz Andrada, personal de Afip, y a Raquel Camacho, personal de Anses, quienes se sumaron a esta causa con entusiasmo y dedicación.

 

A los anfitriones excepcionales de Unión Vecinal Guanacache, al Sr. Rubio, Gabriela, Mariela y la Comunidad Huarpe de Guanacache. Su hospitalidad y apoyo logístico fueron fundamentales para el éxito de esta caravana.

 

La generosidad y el espíritu solidario de San Juan quedaron en evidencia durante esta experiencia única. Las sonrisas de los niños son el mejor testimonio de que cada esfuerzo, cada donación y cada momento compartido valieron la pena.

 

A medida que miramos hacia el futuro, llevamos con nosotros el recuerdo de este día inolvidable y la certeza de que, juntos, podemos hacer grandes cosas por nuestra comunidad. Agradecemos a todos por ser parte de esta maravillosa iniciativa y esperamos que esta sea la primera de muchas caravanas solidarias que ayudarán a construir un mundo más solidario y lleno de amor para todos. ¡Gracias, San Juan!