La crisis en Independiente se acentuó en las últimas horas con una noticia inesperada: Fabián Doman presentó su renuncia al cargo de presidente por intermedio de un comunicado que difundió en sus redes sociales. “Tengo la conciencia limpia. Como las manos. He dejado mi trabajo por Independiente. Y lo volvería a hacer”, escribió en el texto que presentó en su perfil oficial de Twitter. “Es evidente que no se han encontrado las herramientas para ayudar a Independiente. Razón por la cual presento mi renuncia al cargo de Presidente”, informó.
“El club vive tiempos difíciles. Los peores de su historia. La crisis económica, deportiva y judicial del club no tiene antecedentes. Ya sabemos de dónde viene. Su profundidad es tan grande que no alcanza para con un solo espacio político o un grupo de voluntades. En estos seis meses de gestión hemos logrado muchos aciertos, pero también cometido errores, en el plano económico y en lo deportivo”, sentenció. Actualmente, el puesto que queda detrás del presidente es el de vicepresidente 1°, que está ocupado por el Intendente de Lanús, Néstor Grindetti, quien deberá tomar el rol máxima autoridad. Su vice 2° es el periodista Juan Marconi.
“Logramos el objetivo que parecía imposible: sacar a Hugo Moyano y Yoyo Maldonado del club. Me presenté como candidato a Presidente, aclarando en cada aparición en los medios que mi gobierno sería de transición, por un sólo período y por una sola razón: nadie se animaba a enfrentarse a Moyano como candidato a Presidente”, señaló Doman en el texto que presentó como argumentación.
“Ya en el club comenzó a pasar lo peor: la magnitud de la crisis era más grande de lo previsto y por sobre todas las cosas los ingresos económicos mucho menor de lo que presumíamos. Inclusive teniendo hoy la segunda vestimenta más vendida del país, los ingresos de marketing son ínfimos a la hora de compararlos con el pasivo de Independiente. No obstante, el club canceló gracias a aportes, venta de jugadores y diferentes ingresos, deudas por millones de dólares en estos meses. Desde la AFIP, pasando por inhibiciones, hasta meses de sueldos atrasados. Pero no alcanza. Compromisos económicos que hicieron posible que tuviera lugar el espacio político que sacó a Moyano, no aparecieron ni aparecen”, agregó.
Las primeras informaciones desde integrantes del club marcan la sorpresa por la determinación. La agrupación que lideró el periodista ganó los comicios en octubre del 2022 con un récord de votos del 72% sobre una presencia cercan a los 16.000 socios, toda una novedad en términos de presentes para unos comicios del Rojo. El ahora ex mandatario se presentó como socio número 18210 en el comunicado que presentó y dirigió el mensaje a “los hinchas y socios de Independiente”.
El equipo que comanda interinamente Pedro Damián Monzón disputará este miércoles desde las 21.30 su partido correspondiente a la 11ª fecha de la Liga Profesional contra Rosario Central en el Gigante de Arroyito. Mientras tanto, la entidad negocia por el arribo del entrenador uruguayo Pablo Repetto, aunque esta información pone todo en un suspenso ya que no era algo que se esperaba.
Entre los nombres que mencionó Doman en el texto, no aparecen sus dos inmediatos compañeros de la directiva pero sí Cristian Ritondo, el directivo del PRO que fue clave para conformar esta “Unidad Independiente” y estuvo sentado en la mesa principal con Grindetti, Macroni y el presidente saliente tras vencer en las urnas.
EL COMUNICADO DE FABIÁN DOMAN
El club vive tiempos difíciles. Los peores de su historia. La crisis económica, deportiva y judicial del club no tiene antecedentes. Ya sabemos de dónde viene. Su profundidad es tan grande que no alcanza para con un solo espacio político o un grupo de voluntades. En estos seis meses de gestión hemos logrado muchos aciertos, pero también cometido errores, en el plano económico y en lo deportivo.
Logramos el objetivo que parecía imposible: sacar a Hugo Moyano y Yoyo Maldonado del club. Me presenté como candidato a Presidente, aclarando en cada aparición en los medios que mi gobierno sería de transición, por un sólo período y por una sola razón: nadie se animaba a enfrentarse a Moyano como candidato a Presidente.
Ya en el club comenzó a pasar lo peor: la magnitud de la crisis era más grande de lo previsto y por sobre todas las cosas los ingresos económicos mucho menor de lo que presumíamos. Inclusive teniendo hoy la segunda vestimenta más vendida del país, los ingresos de marketing son ínfimos a la hora de compararlos con el pasivo de Independiente.
No obstante, el club canceló gracias a aportes, venta de jugadores y diferentes ingresos, deudas por millones de dólares en estos meses. Desde la AFIP, pasando por inhibiciones, hasta meses de sueldos atrasados. Pero no alcanza.
Compromisos económicos que hicieron posible que tuviera lugar el espacio político que sacó a Moyano, no aparecieron ni aparecen.
Como tampoco un proyecto económico-financiero acorde al club. No era mi tarea ni confeccionarlo ni prepararlo en una comisión directiva los roles se diversifican. Sin embargo, mi responsabilidad como Presidente me llevó a conseguir apoyos financieros sin los cuales el club no hubiera podido pagar los sueldos de diciembre o los aguinaldos.
En el plano deportivo siempre hay tres escenarios. El mejor, el regular y el malo. Se dio el tercero. ¿Responsables? Todos Sería muy fácil endilgarles la culpa a todo el plantel profesional. No lo voy a hacer. Sin embargo, entiendo que la crisis económica es mucho más profunda y seria. No se da vuelta solo con victorias deportivas.
Es evidente que no se han encontrado las herramientas para ayudar a Independiente. Razón por la cual presento mi renuncia al cargo de Presidente.
Tengo la conciencia limpia, como las manos. He dejado mi trabajo por Independiente y lo volvería a hacer. Y no hay día en el año en el que no se me haya visto en una instalación del club. He dejado todo y más.
Mi agradecimiento personal para Cristian Ritondo, quien siempre me apoyó en todo.
Independiente tendrá que aprender a convivir no solo en el plano dirigencial sino en todo lo que lo rodea como institución con menos rencor y resentimiento. Ni siquiera hay una grieta. Hay un todos contra todos sin sentido. Intenté unir sectores y dialogar con todos. Fue también imposible.
Los enconos personales están por encima del club. Desde hace 30 años.
Muchos en mi lugar especularían con algún resultado favorable para llevar adelante este anuncio. O hacerla pública después del clásico en nuestra cancha, el partido más importante del año. Pero demorar la decisión, de la que muchos integrantes de la Comisión Directiva ya tomaron conocimiento, sería también faltarles el respeto a todos. Un párrafo final para el hincha. El que va a la cancha, el que se asoció, el que se abonó, el que no pertenece a ningún espacio político y que no forma parte del día a día del club, y el que hoy la está pasando mal, como yo.
A ese hincha le pido disculpas.
Porque sé que creyeron en mí.
Y que muchos lo siguen haciendo.