Roger Federer, que ganó ayer su octavo título en el torneo de Basilea (foto), renunció a disputar el Masters 1000 de París que arranca hoy, por lo que deja el número uno del mundo al término del año en manos del español Rafael Nadal y que también favorece a Del Potro en caso de avanzar.
La organización del torneo parisino confirmó la baja del suizo, que amplió a siete su cosecha de éxitos en la temporada, 95 a lo largo de su carrera.
Federer ha optado por favorecer su recuperación y no cargarse de partidos antes del Masters de Londres, donde tiene asegurada su presencia.
La baja del Masters 1000 de París aleja al suizo de la posibilidad de terminar el 2017 en la cima del circuito ATP, en poder de Rafael Nadal. Una sola victoria del tenista balear en la cita de París le asegurará acabar el curso como mejor raqueta del mundo.
La renuncia de Federer se suma a las ausencias de Andy Murray, el serbio Novak Djokovic, el japonés Kei Nishikori, el suizo Stanislas Wawrinka, el canadiense Milos Raonic y el checo Tomas Berdych, quienes son seis de los veinte mejores tenistas del circuito.